Rouger precisó que la chiquita está bajo un seguimiento del Copnaf y de otras dependencias municipales que trabajan en ese barrio de la zona noroeste de Concordia. “La menor presentaba aparentes signos de haber sido abusada o que habría sido maltratada”, tras lo cual, “a través del seguimiento y la etapa investigativa surge la sospecha de que estaba embarazada”.
En las próximas horas se estarían conociendo los resultados de los análisis de sangre para descartar o confirmar las sospechas, publicó Diario Río Uruguay.