Santiago del Estero comenzó efectivo desde el perímetro y un gran trabajo defensivo hizo prácticamente imposible romper su última línea, por lo que Entre Ríos solamente consiguió anotar a través de dobles largos o desde la línea de simples. Con un 13-4 en contra, los entrerrianos estuvieron más atentos para cuidar su propio cesto, además de correr la cancha, eso le permitió sacar rédito para acercarse (12-13).
La mano de tres del elenco de Francisco Fernández decayó, situación que le dio a los de la Feber la chance de acortar la distancia. También una mejora en la marca trajo sus réditos, al margen de que Santiago volvió a aparecer desde los 6.75 metros en el final del primer chico, un tramo que, a diferencia de los partidos anteriores, mostró a los entrerrianos de menor a mayor.
Facundo Mendoza hizo olvidar la ausencia de Jeremías Acosta (se quebró la mano) y con su tiró largo empató en 21 tantos. Si bien Santiago basó sus ataques con tiros externos, los inconvenientes en el bloqueo fueron un dolor de cabeza para el plantel de Martín Amden.
Ante una zona 2-3 de los santiagueños Entre Ríos se secó, Emilio Domínguez no facturó las pocas veces que la americana le llegó limpia y apostando al tiro externo, sin suerte, se encontró con un parcial de 19 a 2 (40-23) en contra con el que su rival inclinó la balanza para su lado. El 8/26 de cancha y las nueve pérdidas, hasta aquí, son elocuentes y el panorama quedó más que complicado.
La reacción llegó de a poco. Si bien hubo obstáculos para encestar y las chances de estar en una nueva final estaban complicadas, de la mano de Luciano González, la máxima desventaja de 24 puntos los entrerrianos pudieron acortarla a 13. Una pequeña luz de esperanza se encendió de cara al futuro.
Un inicio prometedor, con dobles de Mendoza, un triple de Ghirardi y un cambio de actitud pusieron a los entrerrianos en partido. A ellos se sumó Felipe País, con una gran asistencia para el Chuzito. Entre Ríos se acercó a nueve unidades (51-60). La levantada no decayó. La defensa provocó tiros complicados a Santiago del Estero y con poco más de cuatro minutos por disputar el encuentro estaba 60 a 56 a favor de Santiago del Estero.
A esa altura, el encuentro dio un giro de 180 grados y fueron los santiagueños los erráticos e imprecisos con la bola (57-60). Desde la línea de simples los de Amden terminaron de sellar una reacción monumental en la que Mendoza estuvo en un alto nivel. Quizás con mejor fortuna en libres, los entrerrianos hubiesen conseguido antes el 60-60 con el que igualaron otra película de drama.
El público jujeño eligió a Santiago como equipo, y el triple con el cual el Penca Aguirre dejó 65-62 a los suyos tuvo festejo. Entre Ríos contó con oportunidades para cerrar la hazaña pero falló.
Un intento de tres marrado desde el eje de cancha por parte del Chuzito fue el último en otra demostración de garra absoluta, al margen del resultado final, da cuenta El Diario.
Foto: El Diario.