En diálogo con AIM, Kindebaluc se refirió a la reunión que mantuvieron funcionarios del Servicio Nacional de Sanidad Animal (Senasa) con representantes de las cámaras frigoríficas entrerrianas y santafesinas, para analizar “la grave situación que atraviesa el sector”, en un encuentro que se desarrolló en la sede de la Cooperativa de Carniceros de Paraná.
Kindebaluc, quien es secretario de Fedeco, detalló que a los funcionarios del Senasa les pidieron “reglas claras para todos; es decir, que controlen a todos de la misma manera, porque resulta que a los frigoríficos los vigilan de manera exhaustiva, pero por otro lado, circulan chatas o camiones cargados con reses que nadie controla”.
El dirigente agropecuario insistió en que “se trató la crisis por la que está pasando la industria de exportación y consumo y las medidas a tomar de manera urgente, antes que sea demasiado tarde”.
Estaba disgustado y no lo ocultó. “La situación se agravó para el sector desde que se cerraron las exportaciones y se liberó el precio de la carne en el mostrador. Pero a eso hay que sumarle los cambios alimenticios de la gente y el hecho que hoy se ofrece carne de cerdo o pollo un 40 por ciento más barata que la de vaca. La gente que cuida su dinero y busca otras opciones, en vez de la carne vacuna”.
Lo cierto es que la situación de los frigoríficos en Entre Ríos, Santa Fe y Córdoba “es muy delicada”, aseveró Kindebaluc. “El martes, la Cámara frigorífica pedirá una entrevista con el ministro de la Producción de Entre Ríos, Roberto Schunk, para solicitar una ayuda. Nadie quiere echar gente, pero si no hay mejoras en la situación, lamentablemente, eso ocurrirá”, sentenció.