En diálogo con ANALISIS DIGITAL, Arlettaz manifestó que “uno se asusta para bien cada vez que avanzamos en el proyecto de ley porque surgen más cosas. La idea es crear un marco donde aplicar distinto decretos reglamentarios a medida que la ciencia avance y de cuenta de nuevas problemáticas.” En este sentido, se decidió que “se pedirá al Ejecutivo una participación muy activa desde este espacio para formular el texto reglamentario, con el fin de poder incorporar cuestiones detalladas y minuciosas”.
Además, declaró que “se reservará en la provincia la potestad de elegir que algunos productos puedan no ser usados a pesar de ser aceptados a nivel nacional por el Senasa”, cuestión que “podría traer algunos problemas que estamos dispuestos a enfrentar”. Por otra parte, explicó que se pedirá colaboración al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y a la Facultad de Ingeniería Bioquímica de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), para que “brinden informes de los procesos de degradación de los productos químicos, a fin de saber cuál es el período que duran los tóxicos en el suelo y en qué sustancia se transforman una vez desaparecidos”.
Finalmente, alertó respecto a que la nueva ley debe “proteger y tener en cuenta al sector de los apiarios, las poblaciones rurales, las escuelas y los cursos de agua”, pero sin “descuidar la producción”. Asimismo, recordó que esta normativa “va en linea con la política de Sergio Urribarri que busca crear un gran complejo agroindustrial en la provincia”.