El listado se titula “Internos que se encontrarían en condiciones de acceder a medidas alternativas de prisión”. Entre los 1436 presos que podrían acceder a la domiciliaria, el SPF incluyó a presos por delitos comunes y condenados por violaciones a los derechos humanos.
Astiz se halla en el apartado de “internos con enfermedades oncológicas”, según consignó Infobae. Tiene 67 años y padece cáncer de próstata. Preso en Ezeiza, con dos condenas a perpetua encima, el represor de la ESMA podría beneficiarse de un arresto domiciliario, dado el SPF estima que la cárcel no es el lugar ideal para un recluso con cáncer.
El marino nunca pidió una morigeración de sus condiciones de detención por su enfermedad. Su suerte depende del Tribunal Oral Federal 5, que lo condenó a perpetua las dos veces que fue hallado culpable por delitos de lesa humanidad, en 2011 y 2017. Además del miembro de la patota de la ESMA, en la lista de pacientes oncológicos que elaboró el SPF hay otros siete presos por delitos cometidos en la dictadura, publicó Página/12.
A principios de marzo, había trascendido otra nómina de 1111 presos pasibles de ser excarcelados, entre ellos 96 condenados por delitos de lesa humanidad. En ese listado figuran represores de la magnitud de Christian von Wernich, Jorge “Tigre” Acosta, Raúl Guglielminetti y el “Turco Julián”.
Astiz integró el grupo de tareas de la ESMA y fue responsable de secuestros como los de Dagmar Hagelin y las monjas francesas Alice Domon y Léonie Duquet, en 1977. Por el caso de las monjas, fue condenado a perpetua en Francia mientras en la Argentina regían las leyes de Punto Final y Obediencia Debida. No podía ir a la cárcel en el país, pero si salía de las fronteras, sería detenido. La anulación de las leyes en 2003 reactivó las causas en su contra y así pudo ser condenado.
Uno de los motivos de estas listas, que incluyen a condenados por el terrorismo de Estado, es, según las autoridades, paliar la crisis habitacional de de las cárceles. No hay tantas excarcelaciones como antes y aumenta el número de detenidos. El plan para ampliar o crear cárceles recién se materializaría, dicen desde el Gobierno, el año próximo.
El espacio “Memoria, Verdad y Justicia” ya se había manifestado en contra de la iniciativa cuando se conoció el listado original y había denunciado que muchos condenados incluidos por el SPF están en la unidad de Campo de Mayo, “un lugar de privilegio”, y que por lo tanto, “difícilmente el dictado de domiciliarias reduzca la sobrepoblación carcelaria”.