“Vamos a seguir hasta la Corte Internacional” y “estamos trabajando en una revisión”. Así definió Rossi la estrategia judicial que seguirá tras conocer que la Corte Suprema de Justicia rechazó su recurso de queja, con el cual buscaba revertir la condena a tres años de prisión condicional, la inhabilitación para ejercer cargos públicos por ocho años y el pago de una multa de 90.000 pesos que le impuso la Sala 1º de la Cámara Penal de Paraná en 2006.
“Vamos a analizar con serenidad. Iremos a la Corte Internacional de Derechos Humanos y (también) plantearemos la revisión, con pruebas y elementos nuevos, documentos que van a demostrar que se equivocaron en el fallo. Hace rato que lo estamos estudiando, pero no lo podíamos presentar hasta que no termine la queja”, precisó en declaraciones a APF.
En ese sentido agregó que “hay que lograr que otro tribunal revise el expediente. La petición se realizará en los primeros meses del años que viene, posiblemente febrero o marzo”.
La apelación a la Corte Interamericana buscará revertir los fallos dados por la Justicia argentina, desde la condena hasta la confirmación de la Corte Suprema, mientras que con el pedido de revisión intentará que el Superior Tribunal de Entre Ríos disponga un nuevo juicio, en el que espera demostrar su inocencia.
“Tenemos pruebas nuevas. Las están estudiando los profesionales”, reiteró. Estos nuevos elementos tendrían la “claridad contundente que precisa el Superior Tribunal” para decidir una revisión. “Son documentos y testimonios, pero fundamentalmente documentos”, detalló, sin entrar en demasiadas precisiones.
Según agregó, estas pruebas nuevas son “tan contundentes y claras” que no tenían “ni la mínima expectativa en la Corte” sino en “la revisión” de la causa.
Igualmente, Rossi se quejó de no haber podido lograr que la Justicia abra la posibilidad de que “otro tribunal revise la condena, como en casos como el del Puerto Ibicuy, donde fue aceptada la apelación extraordinaria a la Corte antes de que exista una sentencia”.
Luego, mencionó que a la sentencia de tres años de prisión condicional “ya la he cumplido”. Y aclaró: “Quedaría la inhibición que, por buena conducta, se puede solicitar (la reducción a) el 50 por ciento de la inhabilitación”, que sería a mediados del 2010, ya que el plazo comienza a correr desde el momento en que se dictó la sentencia, en este caso, en junio de 2006.
La intención del ex vicegobernador es lograr que la inhabilitación para ejercer cargos públicos, que le impide participar en los comicios ahora que el fallo condenatorio está firme, sea reducida al 50 por ciento el próximo año, cuando se cumpla la mitad del plazo inhibitorio impuesto.
“Seguiremos en la pelea judicial. No voy a entrar en ninguna otra solicitud que pueda existir en la Constitución, como la conmutación de penas o el indulto. Creemos que en algún momento se va a aclarar esto. Seguimos trabajando para demostrar que el juicio fue equivocado”, expresó.
En la defensa de Rossi, como él mismo reconoció, está trabajando tanto el abogado del fuero paranaense Julio Federik, como el reconocido constitucionalista Gregorio Badeni, asesor legal también de ex integrantes del último gobierno de facto, como Domingo Bussi, interventor militar de Tucumán durante los años de plomo.
El ex intendente también mencionó las consecuencias políticas de esta decisión de la Corte. “Con juicio o sin juicio, incluso con sentencia, hemos ganado con amplitud las elecciones. No cambia absolutamente nada”, concluyó.