Agregó que “hoy no es un día fácil para esta Presidenta”, al recordar que “hace ocho años, sentada en mi banca de senadora junto a Jorge (Capitanich), que era senador por esta querida provincia, mirábamos jurar como presidente de todos los argentinos a quien fuera mi compañero de toda la vida”.
Recordó que “habían sucedido muchas cosas en esos años. Se vio jurar a muchos presidentes, cinco en una semana, y ese hombre que venía desde el sur a comprometer su vida para llevar adelante las convicciones de miles y miles que 30 años antes en esa misma plaza se habían convocado para cambiar el país y la historia, eran las palabras de alguien que tenía profundos compromisos”.
Inmediatamente, la Presidenta apuntó: “Aquel día, a Néstor Kirchner no lo escuché como su esposa, sino como su compañera de militancia de tantos años, y sentí que finalmente nuestro país iba a comenzar un camino diferente, un camino de realizaciones, de transformaciones, donde los argentinos volvieran a recuperar la confianza en su país y el orgullo de ser argentinos”.