La interna gualeguaychuense habló de la relación de la selección argentina femenina con la CABB, las becas y la inédita situación de estar sin entrenador.
Las integrantes de la selección argentina femenina de básquetbol, Las Gigantes, volverán a recibir desde este mes las becas de parte del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Enard). Se trata de una decisión muy celebrada por las jugadoras, entre ellas la entrerriana Celia Fiorotto, ya que ese beneficio se les cortó desde principio de año sin motivo alguno.
“Fue una noticia muy buena porque, obviamente, hoy está todo parado: nosotras no estamos jugando torneos y no hay ningún tipo de actividad, entonces es un ingreso que nos ayuda a poder mantenernos y viene junto con la obra social. Ojalá que a ninguna nos pase nada, pero en el caso de que nos suceda algo, estamos cubiertas por ese lado, también”, confesó este jueves la interna gualeguaychuense en diálogo con ANÁLISIS DIGITAL.
Los planes de la pívot de Quimsa de Santiago del Estero cambiaron totalmente en el transcurso de los primeros meses de 2020, a raíz de la pandemia de Covid-19 que afecta a buena parte del planeta, porque si bien comenzó a practicar con La Fusión, hoy se encuentra en el sur entrerriano junto a su familia, colaborando con las tareas en el campo de sus padres, lejos de las canchas de básquetbol.
“Yo había arreglado para jugar en Quimsa este año. Estuve un mes entrenando en Santiago del Estero y después empezó la cuarentena. En ese momento nos liberaron a todas y hoy estoy en Entre Ríos”, comentó y reconoció que “obviamente, es complicado” no tener ingresos por la inactividad y la suspensión de las becas desde enero, aunque su situación es más aliviada por no tener mayores compromisos económicos. “Yo ahora estoy viviendo con mi familia. Aparte trabajo en el campo, colaboro con las actividades de ahí. Mis padres compran para comer y no tengo muchos gastos, salvo el seguro del auto”, acotó.
El año para Las Gigantes ha sido atípico, quizás un poco más que para el resto de los seleccionados, porque además de la falta de partidos y torneos, ni siquiera saben quién es el entrenador. Esta situación, sumado a la quita de las becas, hizo que las jugadoras hicieran públicos sus reclamos a la flamante conducción de la Confederación Argentina de Básquetbol (CABB), con Fabián Borro –sucesor de Federico Susbielles– a la cabeza.
“Estuvimos desde febrero hasta que subimos el comunicado esperando algún contacto con las autoridades de la CABB, pero como no llegó decidimos difundirlo. Luego tuvimos una primera reunión bastante positiva, porque por lo menos pudimos sentarnos a hablar algo. Si bien no sacamos muchas conclusiones, logramos exponer algunas de las cosas que necesitamos. Actualmente estamos esperando una segunda reunión”, reconoció.
En cuanto a los reclamos, Fiorotto enumeró: “En primer lugar, tener otra reunión con la gente de la CABB porque, más allá que el entrenador, supuestamente, sigue siendo el mismo del año pasado (Leonardo Costa), no tenemos ningún contacto con él y no nos está haciendo ningún seguimiento, entonces no sabemos si es o no es. Tampoco sabemos quién es su preparador físico”.
Y argumentó: “Necesitamos saber eso para volver a conectarnos y entrenar. No importa si es en nuestra casa, en un club o un gimnasio, porque todas las provincias tienen distintas medidas (por el Covid-19), pero por lo menos para arrancar a hacer algo todos juntos. Más allá que están todas las competencias sudamericanas canceladas por este año, tenemos que seguir entrenando porque esperamos que el año que viene esta situación no se repita y tendremos que volver a jugar”.
Por último, la jugadora con pasado en Berazategui y Unión Florida adelantó que otro de los pedidos de Las Gigantes es que otras jugadoras que han formado parte del seleccionado argentino en 2019, o regularmente han sido preseleccionadas, también sean becadas. “Las que volveremos a recibir la beca somos las mismas que estábamos en el listado anterior. A eso no lo modificaron, pero ahora estamos haciendo las gestiones para que algunas compañeras que terminaron el año en la selección puedan cobrarla. Eso estamos intentando hacer”, concluyó.