Werner llegó a Paraná y fue recibido por una multitud que celebró su título y cantó en contra de Chevrolet. Foto: ANÁLISIS.
de ANÁLISIS
Mariano Werner no para de celebrar su primera corona en el Turismo Carretera. Primero lo hizo en San Juan, más precisamente en el autódromo El Villicum donde se coronó como el monarca en la categoría más importante del automovilismo argentino, y este lunes, pasada la media mañana, lo hizo ante su gente, en su querida ciudad natal: Paraná.
A través de las redes sociales los hinchas de Marianito y seguidores de Ford se fueron organizando y al mismo tiempo siguiendo el itinerario de Werner que ni bien pasó la salida del Túnel Subfluvial se encontró con una multitud que al ritmo de “Dale Campeón…dale campeón” recibió al entrerriano que rápidamente mostró la emoción en su rostro.
Paranaenses, santafesinos, rafaelinos y simpatizantes de distintos puntos de Entre Ríos se hicieron presentes para darle la bienvenida al campeón. A la salida nomás lo esperaron los Bombero Voluntarios de Paraná, que con dos autobombas, trasladaron a Marianito por diferentes calles de la capital entrerriana, hasta llegar a la Plaza 1º de Mayo.
Palabras del campeón
“Feliz de traer la Copa a Entre Ríos, esa que muchas veces se nos negó”, expresó Werner. Y agregó: “El triunfo es de toda la hinchada, de los simpatizantes que tanta fuerza me transmitieron”.
Más adelante se acordó de su hermano y su familia. “Cuantas veces miré al cielo y decía ‘hoy no se me puede escapar’ porque fue una persona que todo este tiempo me faltó. Sin dudas que todo hubiera sido más sencillo con él, pero me enseñó a crecer, a poner más que nunca”, dijo acerca de su hermano, Gabriel.
Además hizo extensivo el agradecimiento a su esposa Micaela, y a sus hijos Salvador y Rafael. “Cuando llegaba desanimado, ese abrazo interminable antes de ir a la carrera.. y Salvador me pedía que trajera la copa, así que cada vez que subía al auto pensaba en eso”.