En ese sentido, el presidente del bloque, Francisco Morchio (Gualeguay), detalló que en su departamento la situación “es muy complicada y comprometida para el sector”, ya que “están en riesgo de perderse los rendimientos de los cultivos de verano, sobre todo, los maíces tardíos, y, fundamentalmente, la soja. La sequía no sólo está afectando los cultivos sino también a la ganadería. Lo único que hoy resiste es la alfalfa”, detalló.
“El panorama no es bueno y, por eso, presenté un proyecto de comunicación, por el que se le pide al Poder Ejecutivo que se declare la emergencia, pero no tuvo la adhesión del bloque oficialista”, recordó luego.
Morchio comentó que mantuvo comunicación con el presidente de la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), para “que le transmita a la mesa de enlace que desde el bloque de Cambiemos entendemos de la situación que están describiendo y por eso vamos a insistir, desde la cámara alta que se declare la emergencia”.
El senador provincial Nicolás Mattiauda (Gualeguaychú) informó que la sequía también está haciendo estragos en el sudoeste de Entre Ríos y, en los departamentos Uruguay y Tala, calificó el fenómeno como “brutal”.
“Los productores agropecuarios van a tener serios problemas para poder cumplir con los compromisos asumidos y van a quedar muy mal parados para la cosecha 2018-2019. El gobernador tiene, rápidamente, que decretar la emergencia agropecuaria para que la Nación la homologue y, de esta forma, los productores puedan atajar, con tiempo, los compromisos que han asumido y que por la sequía no podrán cumplir en tiempo”, señaló.
Mattiauda, instó a Bordet a que en forma “urgente” firme el decreto. “El gobernador no puede desconocer esta situación. Seguramente su secretario de Producción le informó sobre el tema. Es necesario que se disponga de la emergencia para que también reorganice las cuentas de la provincia. Esta es una situación irreversible, por lo tanto no puede dilatar más esta herramienta que necesita el sector productivo”, expuso.
En el departamento Nogoyá, la situación es similar a la del resto de la provincia. En ese sentido, el senador provincial Beltrán Lora informó que los productores de la zona están requiriendo la declaración de emergencia por parte del Poder Ejecutivo provincial. “Creo que el gobernador, en Aranguren, debió haber hecho mención de la situación que vive en el departamento por la sequía. Hay pequeños productores tamberos y lecheros que, al no haber pastura, están en crisis”, detalló.
Por su parte, el senador por el departamento Federación, Miguel Piana, no dudó en describir que en “la sequía hizo estragos en la citricultura. No hay tiempo para poder revertir esta situación. Es muy lamentable”.
“No sólo los productores tienen problemas por la sequía, sino también la tendrán la comunidad entera. Que el sector entre en crisis por la sequía tendrá su efecto dominó en la economía de miles de trabajadores que esperan y viven de la cosecha de la fruta. El daño no sólo lo tendrán los productores, sino también la economía regional y social. Al no haber fruta, no trabajarán los obreros, tampoco los galpones de empaques; el transporte. Todo se verá resentido”, describió Piana.
Ante ese panorama, Piana, recordó que, en la última sesión, el bloque de Cambiemos presentó el proyecto de comunicación instando al Poder Ejecutivo que declare la emergencia, pero los senadores del oficialismo no lo respaldaron.
En Paraná Campaña, informó el senador Raymundo Kisser, el panorama “es desolador”. “Estamos muy preocupados y no sabemos por qué el gobierno entrerriano está demorando la declaración de emergencia”, se preguntó.
En su informe, el senador por el departamento Paraná, dijo que “las pocas lluvias que se registraron en la zona sólo mojaron la superficie, por lo que, hoy, hasta la alfalfa se está perjudicando por la falta de agua. En Hasenkamp, María Grande, Tabossi, Viale o Cerrito, entre otras localidades, se perdieron un 40 por ciento de la producción”.
“En esta zona, la producción que se obtendrá no alcanzará a cubrir la inversión de siembra. Hoy se está trillando el maíz y hay zonas que no tienen rinde. Están sacando unas 4 toneladas por hectáreas, cuando en una campaña regular es de 6 o 7 toneladas”, describió.
A decir de Kisser, la declaración de emergencia no es sólo para que los productores pospongan el pago de impuestos, sino también para que se pueda conseguir financiamiento a tasas bajas. “Me llama la atención la inacción del gobierno provincial ante esta situación”, cuestionó.
En el departamento Diamante, el senador provincial Omar Schild detalló que “la sequía está provocando una situación de emergencia para el sector agropecuario. Hay grandes pérdidas para el campo que moviliza la economía de Entre Ríos”.
En ese sentido, el legislador diamantino indicó que para tener una dimensión de las pérdidas y la situación que causa la sequía, en “el caso de la soja, se sembró para cosechar 3 millones de toneladas; a un cálculo de 300 dólares la tonelada, estamos hablado de 90 millones de dólares que tendríamos los entrerrianos en una campaña regular. Hoy, por esta situación, se estima que las pérdidas rondan un 50 por ciento en toda la provincia”.
“En el departamento Diamante no tenemos lluvias desde el mes de diciembre y los rindes no serán los esperados, tendremos pérdidas importantes en la soja y maíz y se sentirá en todo el departamento”, completó.