En declaraciones a Inventario 22, Candiotti recalcó que lo que ven “es un atraso, no un incumplimiento, sino un atraso en lo que estaba previsto”. Asimismo, el gremialista explicó que “la mayor complicación” está con “los peones, vareadores, herreros, talabarteros y demás, no tanto con la parte administrativa, que está medianamente encaminada”.
Sobre la situación de riesgo laboral en la que se encuentran los trabajadores del Jockey Club Paraná, Candiotti dijo que “desde que el Jockey se convoca primero y quiebra después, empezaron los problemas. En ese marco, hay una empresa que compra la quiebra, y que está cumpliendo en algunos acuerdos que tenemos respecto de trabajadores del área administrativa. Pero lo que vemos, es que hay alguna tardanza con el cumplimiento en la construcción de las instalaciones del nuevo hipódromo en Oro Verde, que es uno de los puntos del contrato de compra, y empiezan a apurarse, con todo su derecho, en la construcción del proyecto para el predio de lo que era el Hipódromo Almafuerte, conforme a lo que compraron los inversores”.
El asesor legal del gremio aseguró que decidieron venir a Paraná “ante el anuncio oficial del inicio de las obras”. Y explicó: “Nosotros no conocíamos, recién lo estamos viendo, lo que es el contrato. Este es un contrato privado firmado entre las anteriores autoridades de Club, que hoy ya no están, con la empresa y un fideicomiso que hizo de intermediario en esta negociación. Entonces acá no hay dos patas, sino que hay tres patas. Después aparecen varios propietarios del predio de lo que era el Almafuerte. Entonces hay que ir compatibilizando los distintos intereses. Yo creo que para la ciudad de Paraná es muy bueno que se haga un avance en este tema, pero también hay que ir mirando dónde algunos trabajadores continúan sus actividades, que en definitiva es nuestra preocupación, porque no vemos que avance la obra de las instalaciones de Oro Verde, para poder hacer el traslado de lo que era el Almafuerte al nuevo predio”.
En cuanto a las responsabilidades en el avance de las obras, el asesor legal de los trabajadores puntualizó que “la obra debe hacerla la empresa que compró. Eso lo acabamos de ver en la obligación, y vemos que están atrasados. Al estar atrasados, por ahí surgen algunas variantes que tendrían que arreglar con las autoridades del Jockey Club. Pero nosotros en lo que sí vamos a estar es a no desatender a los trabajadores, a los cuales venimos a defender junto a sus familias y la fuente de trabajo”.
Sobre un posible diálogo con el gobierno, el sindicalista manifestó que no lo han tenido. “No, porque es un convenio entre privados. Hemos conversado sí con las autoridades del Jockey Club, que formuló un convenio de acuerdo a su quiebra entre una institución sin fines de lucro, como son estos clubes, e inversores, que está en la mitad del cumplimiento. Por ahí hay algunos temas atrasados, y creo que con buen tino tratan, tanto el gobierno municipal como el provincial, que las cosas se encaucen en lo que está acordado y firmado”.
Para Candiotti, la misión como sindicato “es defender a los trabajadores y a sus familias, por supuesto. Pero sin venir a adjudicarle culpas a nadie, sino tratar de que las cosas se encaucen. Por lo que vimos, los convenios están bien hechos, pero lo que vemos es que hay atraso, entonces, esos atrasos habría que acelerarlos, sobre todo en la construcción de Oro Verde, y no apurar por ahí el inicio de las obras en el Almafuerte, porque una cosa va con la otra. Si no puedo trasladarme como corresponde a Oro Verde, tampoco pueden meterse ya en Almafuerte”.
En tanto, el asesor legal dijo que todavía no llegaron a un acuerdo con la empresa. “Solamente hemos hablado con las autoridades del Jockey. En este momento, el Almafuerte tiene 96 caballos en trainig, con cuidadores iportantes, como Nievas, que están yendo todos los fines de semana, o fin de semana por medio a correr a Palermo y San Isidro con caballos que están alojados acá. Y esto es lo que venimos a preservar. Buscar la mejor manera, sin incomodar a nadie, de que esto tenga su cauce, porque los contratos y los convenios están en un buen sentido, lo que vemos es un atraso, no un incumplimiento, sino un atraso en lo que estaba previsto”.