Los gremios ya adelantaron que no aceptarán una oferta inferior al 20 por ciento, en base a la inflación estimada por la mayoría de las consultoras privadas desde que Nación "recalibró" las metas para 2018 y la elevó del 10 al 15 por ciento.
Para la paritaria docente serán convocados los representantes gremiales de la Asociación de Magisterio de Santa Fe (Amsafé), el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop), la Unión de Docentes Argentinos (UDA) y la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (Amet). La reunión con ellos será, a las 10, en la sede del Ministerio de Trabajo de la ciudad de Santa Fe.
A la discusión de la administración central serán citados los líderes de la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN) y de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Este cónclave, a la misma hora, será en Casa de Gobierno.
En diálogo con La Capital, Saglione destacó que el gobierno de Miguel Lifschitz irá a la negociación salarial con los gremios "con dos premisas básicas".
Por un lado "que no haya pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores, que ha sido la política del Frente Progresista en estos años de gobierno en la provincia".
Y, en paralelo, "que se trate de una pauta de incremento salarial razonable que pueda ser abonada en base a los recursos proyectados a lo largo del año, sin comprometer las finanzas de Santa Fe ya que los salarios representan más del 40 por ciento del gasto público".
Cuando se le preguntó al titular del Ministerio de Economía si la Casa Gris tomará como referencia el 15 por ciento de inflación estimada por la Casa Rosada para 2018, Saglione respondió: "Vamos a la paritaria sin dogmas, sin piso y sin techo. A escuchar los planteos gremiales y mostrar los números que tenemos".
Respecto a la eventual inclusión de la cláusula gatillo en la negociación de este año, el funcionario deslizó que la gobernación no descarta sostenerla para evitar así un número porcentual más alto del proyectado en la inflación anual.
"La verdad es que el año pasado fue un buen instrumento para cerrar el acuerdo salarial sin tanta incertidumbre y con un porcentaje acorde a lo que se podía abonar y a lo que se estimaba iban a subir los precios", fundamentó.
En ese sentido, Saglione ponderó que "el porcentaje acordado no estuvo lejos de la inflación y recién en el último mes del año quedó por debajo del IPC y de manera automática se liquidó a los trabajadores el 1,1 por ciento restante".
El titular de la cartera económica provincial negó haber recibido "presiones o sugerencias" de la Casa Rosada para eliminar de la paritaria en Santa Fe la cláusula gatillo para evitar una virtual indexación de la economía. Menos para reemplazarla por una de revisión hacia fines de año.
Los gremios más representativos de docentes y estatales ya adelantaron que irán por una suba cercana al 20 por ciento.
Y también plantearon que pretenden sostener la cláusula gatillo para evitar que el salario pierda poder adquisitivo en caso de dispararse la inflación por encima de lo estimado, una exigencia muy extendida entre las bases.