Apuntó contra “la hegemonía mediática”, “un eje político” que siempre existió “y una tercera pata que aparece en esta década”, al aludir al “partido judicial sobre el cual uno puede ver cómo se opera en los distintos países de la región”.
Chicanas. La presidenta advirtió esta tarde que “no es lo mismo ser ministro de un gobierno popular, que ser ministro de un gobierno mediático o con impunidad mediática”, al remarcar que “son dos cosas diferentes”, en alusión a la administración del presidente electo, Mauricio Macri, que comenzará mañana.
En el último acto de su gestión, en ocasión de la inauguración de un busto del ex presidente Néstor Kirchner en la Casa Rosada, la mandataria efectuó un agradecimiento a los funcionarios que la acompañaron durante sus dos mandatos porque, dijo, “tuvieron que bancar agravios, calumnias e injurias”.
También se valió de la política exterior “desideologizada” que impulsará Macri para asegurar que la administración Kirchner mantuvo una balanza comercial deficitaria con los Estados Unidos, mientras que en “las relaciones carnales” de los 90 era superativaria. “Vieron que no somos los más ideologizados”, planteó.
Recuerdo. Tras omitir su nombre durante casi toda la campaña, la presidenta le agradeció a Daniel Scioli, el “acompañamiento que siempre tuviste con nosotros”, durante los 12 años de la gestión kirchnerista y motivó un coreo de “Daniel, Daniel” de los presentes en el acto en la Casa de Gobierno.