Por Jorge Daneri,
especial para ANÁLISIS DIGITAL
Una multisectorial articulada desde la Municipalidad con las Escuelas primarias y secundarias, con las universidades, retomando viejas propuestas de arbolado de la ciudad, lideradas por Juan de Dios Muñoz y los colegas que aún sostienen su visión profesional e ideológica, desde el diálogo de saberes, con las organizaciones ecologistas, con “la Tribu del Salto”, con las vecinales y también, con una capacidad multipartidaria de encontrarse los partidos políticos, todos.
Un llamado desde el grito de la tierra, a vestir de verde nuestro lugar en el mundo, dándole al árbol todos los espacios que le han sido quitados, negados, liberándolo para beber el agua de sus lluvias, protegiendo sus raíces, ampliando veredas y espacios públicos, convocando a los artistas a pintar los sueños, de que somos capaces de transformar un desastre en no una, sino cientos de obras de artes, para que la bella Paraná, vuelva, no muy lejos, a ser una celebración, de los verdes nuestros.
Igual deberíamos hacer con todos los arroyos y ríos de la provincia, no importa el tamaño, con las semillas de lo nuestro, con la poesía y la política que escucha a las aguas y sus naturalezas vivas, que mira el futuro y no se inunda en un presente de tristezas y frustraciones.
Un plan hacia lo verde que ponga en acción la democracia participativa y la capacidad de pensar lo impensado, como dice el Maestro aquél, de la que fuera la Escuela Marina Vilte de la CTERA grande y luminosa.