En cuanto a la remoción de Geminaini, el abogado sostuvo: “Es algo inexcusable lo que se hizo con un juez natural de la Constitución, porque es una persona que ha pasado por los filtros de todo el proceso que marca la ley en vigencia para llegar a ese lugar. Esto es un atropello, porque por una cuestión de arbitrariedad, ya que no había ningún motivo para recusar al juez, quien fue compañero mío de facultad, ya que es nacido y criado en Paraná y ejerció muchos años como abogado junto a su padre. Se trata de una persona que al momento de ser designado juez gozó de todas las cualidades profesionales y personales para llegar a ese lugar, pero alguien del poder imaginó que iba a votar en contra de los intereses del gobierno en el acuerdo con Irán en la causa AMIA y por eso pasó esto”.
“Un juez puede ser recusado por cosas que están taxativas como puede ser tener una opinión ya dicha sobre una cuestión o un interés personal, pero jamás se va a hacer porque crean que puede votar de forma contraria a los intereses del gobierno. Esta es una suerte de prestidigitación, donde supusieron que iba a fallar en tal o cual sentido, que podría ser adverso al gobierno y por eso echaron mano a cualquier tropelía, llevándose por delante la legalidad de la persona que se supone que va a votar en contra del gobierno y poner a otra que sí votaría a favor de ellos”, indicó en declaraciones al programa A quien Corresponda (Radio De la Plaza).
El abogado recordó que “esto ya pasó antes con el juez Luis Cabral, que estaba subrogando a un camarista de casación, pero Geminiani era juez natural de ese cargo. Muchas veces un juez por alguna enfermedad necesita dejar un tiempo su juzgado por una licencia, entonces otro magistrado colega pero también natural, lo reemplaza”, explicó.
Sobre la decisión de la Corte Suprema, manifestó: “Me hubiera gustado que mucho tiempo antes fuera tan contundente, sin embargo de alguna manera estuvo poniéndole un freno a estas actividades desenfrenadas del Poder Ejecutivo que apela a estas estrategias de cuarta que atropellan la Constitución y que quieren poner a un abogado de matrícula que no tiene ningún mérito académico o intelectual, que sólo está en ese lugar por tener ideas afines al gobierno”.
En esa línea, añadió: “Hubo varios fiscales que tuvieron que pasar por estas cuestiones sólo por tener la osadía de cumplir con un deber primario que es el de investigar hechos irregulares o de corrupción. Uno no encuentra otra motivación más que el interés mezquino del gobierno”.
Asimismo, señaló: “Hay que recordar que estos jueces naturales llegaron luego de un proceso de filtros y fueron designados legalmente. Estos magistrados no tienen privilegio de inamovilidad porque sí, sino para que no sean presionable por ningún poder fáctico y que eso le dé independencia”.
Más adelante se le consultó sobre el rol que toman los colegios de abogados ante esta situación y reconoció que “en general están bastante desdibujados. Yo he sido muy claro en esto y me ha costado varias fricciones con algunos colegas. Siempre los colegios llegaban tarde a los acontecimientos que tenían que ver con la independencia del Poder Judicial. Cundo asumimos en esta gestión nos tocó trabajar en cuestiones fuertes que estaban en la agenda pública, como fue con el tema Nisman, pidiendo mayor celeridad y transparencia. El tema del acuerdo en que el gobierno le solicitó un crédito a China y también nos tocó salir a defender a Cabral y Fayt, quienes fueron atacados por personajes menores de este gobierno”.
Dijo que sobre la cuestión de Geminiani, el Colegio de Abogados no podrá presentar ningún pedido legal, pero “sí se hacen las críticas correspondientes. Siempre que haga falta vamos a salir a opinar y a participar colectivamente, como ya lo hicimos cuando nos opusimos a la designación de Carlés”.
Finalmente, hizo un balance de la Justicia entrerriana durante estos años del urribarrismo. “Hay que reconocer que hay excelentes magistrados, abogados y fiscales, pero la Justicia no ha estado a la altura de las circunstancias, sobre todo el Ministerio Público Fiscal que no quiere o no le interesa tener una política clara de persecución de los actos de corrupción que están atentando contra las instituciones de la provincia. Todas las denuncias importantes que se hicieron en Entre Ríos fueron porque las hizo algún legislador o un abogado. La Procuración General de la provincia maneja muy bien los tiempos políticos y tira la cuerda y la recoge cuando le conviene. Creo que si hubiera ganado De Angeli o cualquier otro candidato, hubieran salido a aligerar algunas causas tratando de mostrar independencia”, opinó Pabiotto.