Jorge Messi llegó a Barcelona y dejó en claro que no será sencillo que Lionel siga en el Barça.
Jorge Messi arribó a Barcelona en la madrugada argentina y se dirigió inmediatamente para su despacho en la ciudad catalana, antes de la reunión que tiene agendada para este miércoles con el presidente del Barça, Josep María Bartomeu. A pesar de la cantidad de micrófonos que lo esperaban, el padre de Leo evitó hacer grandes declaraciones, pero bastaron unas pocas palabras para saber que el final está cerca.
“Es difícil que Leo se quede”. Concreto y sin vueltas estuvo Messi padre ante la insistencia de la prensa, que lo esperaba en el aeropuerto El Prat y lo siguió en taxi hacia su oficina en Barcelona. Allí sucedió una reunión preliminar con sus abogados, donde se repasaron los pormenores del contrato de Leo y se examinó la famosa cláusula que marca la mayor diferencia entre el club y el futbolista.
Desde el club intentaron endurecer su posición al reclamar el pago de los 700.000.000 de euros de la cláusula de salida de Leo, pero el entorno Messi entiende que no es necesaria semejante erogación, ya que su contrato le da la potestad de irse en libertad antes del cierre de la temporada 2019/20. Ahora, claro, discutirán cuándo terminó el año deportivo, con el factor pandemia de por medio.
Más allá de que Jorge adelantó que la historia de Messi en el Barcelona está por terminar, el padre de Leo no quiso dar pistas sobre el futuro concreto de su hijo. En declaraciones a Deportes Cuatro, aseguró que “del Manchester City no sé nada” y agregó: “No hablé con Guardiola”.
Ahora todos los focos pasan a enfocar la reunión que se produciría durante la tarde catalana, en las oficinas del Camp Nou. Lo primero, marcó Jorge como prioridad, es resolver la salida de Leo del Barcelona de la forma más amistosa posible, siempre que el club no intente embarrar la cancha.