San Telmo sorprendió a Banfield, lo venció 1 a 0 y accedió por primera vez a los cuartos de final de la Copa Argentina. La definición de Thomas Amilivia le permitió festejar en el estadio Alfredo Beranger, de Temperley, y comenzar a perfilarse como la relevación de la novena edición del certamen que reúne a las categorías superiores del fútbol nacional.

El exPatronato Gustavo Canto exhibió sus credenciales en el inicio del juego con un desborde por izquierda que concluyó con un centro que no llegó a desviar Juan Manuel Cruz. El cambio de esquema impuesto por Javier Sanguinetti (pasó de un 4-3-3 a un 4-4-2) le permitió lograr amplitud en pos de explotar de mejor manera las bandas y buscar envíos hacia la dupla delantera conformada por el mencionado juvenil y Luciano Pons, que también avisó con un fuerte cabezazo contenido por Alan González. El punta que disputó la primera edición de la Copa Argentina con Argentino de Rosario llegaba motivado por los tantos marcados en las anteriores eliminatorias ante Atlético Güemes de Santiago del Estero y Deportivo Madryn.

Pese a la diferencia de categoría favorable al rival, San Telmo sostuvo la propuesta intensa y protagonista que caracteriza su andar en la Primera Nacional. La presión sobre la salida de Banfield le permitió generar una opción clara para tomar la ventaja. Ramiro López recuperó la pelota ante Giuliano Galoppo y, luego de una pared con Thomas Amilivia, dispuso de un mano a mano con Facundo Altamirano. El arquero, semifinalista de la última edición con Estudiantes de Buenos Aires, desvió el remate por encima del travesaño. El inconveniente estratégico del conjunto dirigido por Pablo Frontini quedaba en evidencia cuando disminuía la intensidad, ya que les daba tiempo a los marcadores centrales del Taladro para conducir y no retrocedía correctamente en la cobertura de los espacios. De esta manera, Alexis Maldonado quebró la línea defensiva con un envío largo y recto que habilitó a Pons. La demora del delantero en la definición impidió que se quiebre la paridad.

El equipo de Iván Delfino se impuso con gol de Nicolás Delgadillo, a los 28 minutos del complemento (Foto: Copa Argentina).

Patronato ganó y se metió por primera vez en los cuartos de final de la Copa Argentina

El complemento observó un mayor protagonismo de Banfield a raíz de una merma física de San Telmo, que no logró sostener la intensidad de la etapa inicial y optó por refugiarse en las cercanías de González (había protagonizado una brillante atajada frente a un intento de Mauricio Cuero). La escasez de profundidad del Taladro facilitaba el trabajo defensivo del club de la Isla Maciel, motivo por el cual Sanguinetti optó por el ingreso de Joel Soñora, que podía oficiar de nexo entre el mediocampo y la delantera, en lugar de un Pons fastidioso y dedicado a pelear con los rivales; también sustituyó a dos futbolistas claves en el andamiaje como Giuliano Galoppo y Cuero, sin mayores intervenciones destacadas, por Valentín Barbero y Ramiro Enrique.  

Frontini motivó la reacción de San Telmo con el ingreso del experimentado Rodrigo Depetris, que reemplazó a López en la posición de mediapunta y llevó riesgo con un remate de media distancia que salió por encima del travesaño. Además, el Candombero llegó con un lateral de Franco Quiroz que encontró distraída a la dupla de marcadores centrales de Banfield y facilitó la aparición de Amilivia. El delantero le ganó la posición a Luciano Lollo pero no logró darle dirección al tiro y lo estrelló en el cuerpo de Altamirano. Sin embargo, el jugador surgido en Sportivo Italiano tendría revancha cerca del epílogo del encuentro. Luego de una maniobra brillante de Lucas Melgarejo, que eludió a tres futbolistas y alcanzó a ceder la pelota previo a caerse al piso, Amilivia sacó un remate que se desvió levemente en Maldonado e ingresó en el arco. Desahogo en el banco de suplentes de la humilde institución de la Isla Maciel.

Un intento desviado de Barbero y un cabezazo de Enrique que salió al lado del arco. Los corazones de San Telmo se paralizaron transitoriamente en aquellas acciones, pero el sufrimiento valió la pena. El pitazo final de Pablo Giménez desató la algarabía en el plantel comandado por Frontini, que logró su tercera victoria consecutiva sin recibir tantos y aguardará por Gimnasia La Plata o Argentinos Juniors en la instancia de cuartos de final. Es el primer representante del ascenso que asegura su presencia entre los ocho mejores de la presente edición.