Estudiantes superó 1 a 0 a Nacional de Uruguay, en La Plata, con gol de Manuel Castro en la primera etapa, llegó a los 10 puntos y es el líder del Grupo C después de lograr un puntaje ideal como local, además consiguió el pasaporte a la siguiente fase, cuando todavía restan dos encuentros para la finalización de la fase de grupos.

El partido fue áspero, luchado y con una gran polémica en el final por una mano a Noguera que Nacional le reclamó al árbitro colombiano. Nacional utilizó la misma estrategia que el partido de ida, con Yonatan Rodríguez y Carballo presionando a Zuqui para que Estudiantes no tenga con espacios al cerebro del equipo.

Los de Repetto, con más posesión de pelota, pero sin profundidad y llegó en un centro de Trezza que se desvió en Más exigió a Andújar que descolgó la pelota en el segundo palo. Estudiantes sin claridad fue más punzante y de entrada Díaz con un zurdazo complicó a Sergio Rochet.

Luego a los 16 minutos un tiro libre de Zuqui encontró la cabeza de Rogel y Rochet la sacó abajo contra el palo. A los 26 minutos se repitieron los protagonistas y Rochet volvió a responder ante un remate de Díaz.

En el minuto 40 Godoy aceleró, llegó hasta el fondo, centro atrás, la tocó Díaz, y Castro de zurda le cambió la dirección a la pelota, que se desvió en el camino para conseguir el triunfo parcial.

En el complemento Nacional salió con todo en busca del empate, complicó por derecha con las proyecciones de José Rodríguez y por izquierda con Lozano que a los siete minutos tuvo una buena chance pero remató desviado. El dueño de casa pudo aumentar en un pase de Castro a Boselli, pero no tuvo precisión y el derechazo se fue desviado.

El conjunto uruguayo tuvo una buena aproximación con un centro al segundo palo que Trezza no llegó a empujar. Los de Zielinski tuvieron otra chance en un córner de Zuqui que Noguera cabeceó por arriba y después Más remató desviado.

En el descuento llegó la gran polémica de la noche. Un centro de Nacional, Noguera saltó solo, le rebotó en el muslo y después en la mano que Wilmar Roldán no interpretó como intencional a pesar del reclamo del equipo visitante. Y así se consumó otro éxito platense.