
El taller de recreación y juego estará destinado a niños y niñas con discapacidad.
A partir de este viernes, el Club Atlético Diamantino (CAD) abrirá las puertas a una nueva y valiosa propuesta destinada a niños y niñas con discapacidad. Se trata de un taller de recreación y juego que busca brindarles un espacio de disfrute, integración y desarrollo fuera del ámbito escolar y terapéutico. La iniciativa es impulsada por un equipo de docentes que desde hace tiempo venía observando una necesidad concreta en la comunidad de Diamante: la falta de espacios recreativos accesibles y permanentes para esta población infantil.
“La idea surge de visualizar, hace ya mucho tiempo, que en la ciudad los niños con discapacidad no tenían una propuesta de deporte, arte o música por fuera de la escuela”, explicó Marisa Albornoz, una de las docentes a cargo del taller. Y agregó: “Faltaba algo: un espacio donde simplemente se proponga jugar y pasarla bien, como lo hace cualquier niño en los clubes, gimnasios o centros de la ciudad”.
El objetivo principal del taller es acompañar el desarrollo integral de los niños desde la recreación. Lejos de los esquemas médicos, los informes o las listas de espera, este espacio pretende ser libre, accesible y lleno de oportunidades para encontrarse con otros. Según detalló Albornoz, la recreación no solo genera disfrute, sino que también fomenta la participación social, mejora habilidades físicas y cognitivas, y fortalece la autoestima.
Entre las actividades planificadas se incluyen juegos grupales, caminatas por el predio del club, uso del sector de hamacas, bailes y encuentros compartidos con otros grupos que realizan actividades en el CAD. “No se trata solo de incluir, sino de convivir. Que los chicos estén, participen, jueguen y se relacionen naturalmente con otros. Esa es la apuesta”, subrayó.
Este taller también representa un fuerte mensaje para las familias: ahora hay un lugar pensado para sus hijos. Un espacio sin barreras, sin trámites previos, sin la necesidad de justificar o demostrar nada. Un lugar donde no hace falta sacar turno, ni lidiar con una obra social, ni esperar un informe. Solo llegar y jugar.
“Queremos que los niños y sus familias vivan este espacio con felicidad, con el agrado de estar, de ser parte y de participar”, expresó la docente con entusiasmo. Porque el CAD no solo es un club con historia, sino una institución que elige caminar hacia el futuro con valores claros: inclusión, comunidad y derechos.
Este nuevo taller refuerza esa identidad y amplía el alcance del club a toda la ciudad. Desde este viernes, el CAD es, más que nunca, un lugar para todos. Una casa abierta al juego, al encuentro y a la igualdad de oportunidades. Porque jugar también es un derecho. Y en Diamante, ahora, ese derecho se celebra.