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Patronato gana, pero la popular no goza de buena salud

Castro

Castro le dio el triunfo a Patronato frente a Alvarado de Mar del Plata. Foto: Jano Colcerniani.

Ezequiel Re

La medianera de la Primera Nacional, en algunos casos, son los arbitrajes. Un día un simple agarrón lo toman como un “no pasa nada, jueguen”. En otros se transforma en un “claro penal”. En un partido Patronato puede padecer un pésimo arbitraje (fecha anterior ante Deportivo Madryn) y en otros llegar a la victoria por un penal tras un simple camiseteo en esta generación de cristal donde, ante el simple cosquilleo de una mano rival, el jugador se deja caer como si estaría recibiendo una simple falta.

En definitiva, Patronato, este domingo, abrió el partido por la fecha 25 de la Primera Nacional de local en el Grella ante Alvarado de Mar del Plata mediante la vía del penal que conectó Castro, tras marcarlo el juez Viñas. Lo ganó 1 a 0, no le sobró nada, pero aprovecha sus tiempos. Con esa data simple hoy le alcanza para estar en el grupo de los 8 y seguir viendo de reojo el primer puesto.

Futbolísticamente, en un torneo parejo, donde reinan los errores y virtudes, el Santo parece caminar hacia la clasificación.

Ahora quedará ver si tendrá resto más adelante, para ser protagonista y pelear por el ascenso a Primera. La ilusión nunca se pierde, más con un equipo que tiene materia prima para alimentar el sueño.

Párrafo aparte para el acompañamiento de la gente. Al margen de la situación económica imperante, la popular no goza de buena salud. Habrá que insistir para volver a enamorar al hincha. Patrón sigue prendido en la segunda categoría del fútbol argentino.

Desde 2010 en el profesionalismo puro. Sin embargo, el vacío de la tribuna de San Nicolás, debería ser una luz amarilla. Mientras tanto el equipo va para adelante, viendo de subir escalones y volver a brillar.

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