Retorno en marcha
Cuando Sergio Montiel reapareció públicamente, hace unas semanas, en un acto realizado en El Paracao, quienes siguen de cerca los movimientos del ex gobernador dijeron que era “una cuestión del momento”, sin mayores perspectivas de futuro, habida cuenta de la edad del ex gobernador. Está claro que se equivocaron. El viejo caudillo, de 78 años, está organizando, personalmente, un asado para unos 3.000 radicales, que se llevará a cabo en una fecha a determinar, en marzo del año próximo.
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Patas cortas
La semana pasada, el dirigente gremial Adrián Meynier, recordó ante los medios cómo fue salvajemente baleado por personal policial, en los hechos trágicos de Diciembre de 2001. Recordó los 39 balazos de goma que debió soportar su cuerpo, por el simple hecho de pedirle a los policías, en la puerta de su vivienda -en la zona de Bajada Grande, cerca del supermercado Wal Mart- que dejaran de reprimir contra tantos inocentes. Incluso, Meynier, no dudó en recordar que a uno de los policías que reconoció cuando lo tirotearon -parado en la vereda y dando órdenes de reprimir- fue al comisario Carlos Catena, actual subdirector de Investigaciones de la Policía de Entre Ríos. Además, Meynier relató que Catena estaba vestido de civil y dijo que, en verdad, lo conocía, porque el alto oficial prestaba funciones en la Comisaría de Bajada Grande y lo había visto en varias oportunidades. Al día siguiente de las declaraciones de Meynier, Catena salió a desmentir las aseveraciones del dirigente; dijo que no lo conocía; que no había estado allí y que nunca reprimió. “Simplemente participé de los hechos, pero informando lo que sucedía”, dijo. Pero no fue lo único, pocas horas después apareció haciendo declaraciones periodísticas el abogado de Catena. ¿Quien era? Nada más y nada menos que Marcos Rodríguez Allende. Obviamente, desmintió en forma tajante los dichos de Meynier e incluso le contestó con cierta ironía. “Me extraña que este señor diga estas cosas, que asegure haberlo visto al comisario Catena y nunca antes lo haya señalado, porque mi defendido nunca apareció mencionado en el expediente, por esta persona”, afirmó.
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¿Y las vacaciones?
Varios medios uruguayos siguen atentos los movimientos del gobernador Jorge Busti y de sus funcionarios, ante las vacaciones de enero y la histórica decisión de muchos de ellos, de concurrir, como cada año, a las playas del vecino país. Fuentes provenientes de la capital del país indicaron que algunos periodistas disponen de un completo listado de hombres cercanos al gobernador, que en los últimos 10 años vacacionaron, fundamentalmente, en Punta del Este y, si bien Busti ordenó que ninguno de ellos cruce los puentes para irse de vacaciones al Uruguay, se calcula que “algunos” no dejarán de ir. “Están en contacto permanente con los puestos fronterizos uruguayos para que le avisen de inmediato y así escracharlos, en revancha por la fuerte resistencia a la instalación de las papeleras en Fray Bentos”, se indicó.
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Un traje a medida
En altas esferas del Poder Ejecutivo provincial no cayó muy bien la decisión de la Cámara de Diputados, de aprobar un proyecto, por el cual se cambió un artículo, que ahora prevé que los magistrados puedan ser candidatos políticos, si así lo disponen. “Le hicieron un traje a medida del diputado Emilio Castrillón (PJ-La Paz); él fue el que nos pidió casi hasta el suplicio que aprobemos esta idea suya”, indicó una fuente de un bloque oficialista.
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