El Carnaval del País derrotó al frío y 24 mil personas volvieron a llenar el Corsódromo

La comparsa Ará Yeví del Club Tiro Federal abrió la séptima noche del Carnaval del País, ante más de 24 mil personas que disfrutaron en el Corsódromo de Gualeguaychú. Crédito foto: Prensa Carnaval.

La comparsa Ará Yeví del Club Tiro Federal abrió la séptima noche del Carnaval del País, ante más de 24 mil personas que disfrutaron en el Corsódromo de Gualeguaychú. Crédito foto: Prensa Carnaval.

Por Nahuel Maciel

(De ANÁLISIS)

 

El fin de semana largo del carnaval se vive a pleno en Gualeguaychú. Con un Corsódromo que anoche recibió a 24 mil personas (según los organizadores), el Carnaval del País derrotó al frío y tornó la noche en una cálida fiesta donde la pasión se abrazó con el arte para celebrar la alegría.

Ayer aportaron su presencia la modelo y panelista del programa “Bendita” (Canal 9) Alejandra Maglietti; la influencia de redes sociales Julieta Puente y Ramitagram, conocido por publicar contenido audiovisual en su propio canal dentro de la web de videos YouTube.

Minutos antes de las 22, la voz del Carnaval del País, Silvio Solari, anunció el orden de salida dando inicio a la séptima noche, previo a recordar que esta edición lleva –a manera de homenaje- el nombre de Bartolomé Clemente “Tole” Luciano, identificado con los colores del Club de Pescadores (O´Bahía).

El orden del desfile fue el siguiente: Ará Yeví (Club Tiro Federal) que presentó “Indiferentes”, en segundo lugar lo hizo Kamarr (Centro Cultural y Social Sirio Libanés) con “Impulso, ¡Un grito de conciencia!”, el tercer turno fue para Marí Marí (Club Central Entrerriano) con el tema “Enérgica”, O’ Bahía (Club de Pescadores) con “O’ Bahía Rock” y el cierre estuvo a cargo de Papelitos (Club Juventud Unidad) con su tema “León”.

 

El feriado del carnaval se vive en Gualeguaychú

 

El carnaval siempre se lo ha asociado a la alegría, al festejo, a la participación colectiva, al arte y superar los límites cotidianos o rutinarios.

Su origen es diverso porque se trata de una manifestación que siempre ha estado en el corazón de toda sociedad y cultura. Se podría sintetizar que es una fiesta para expulsar los males de época y al mismo tiempo convocar al otro para celebrar la alegría.

En la historia contemporánea, en 1976 la última dictadura cívico militar había quitado del calendario el feriado del Carnaval. Fue el 3 de noviembre de 2010 –cuando la recuperación de la democracia iba a cumplir 27 años- que se publicó en el Boletín Oficial –gobierno de Néstor Kirchner- su restitución como parte del reconocimiento a la identidad, a la memoria y a la alegría que representa esta celebración que es indiscutidamente una fiesta popular.

El Carnaval del País constituye tal vez la fiesta más importante no solo del Litoral sino de la región y por eso tiene carácter internacional y una reconocida trascendencia por tributar a la cultura popular un innegociable sentido colectivo.

Todos los sábados de enero y febrero, en Gualeguaychú se lo vive las 24 horas en los hogares, en las playas, en las calles, en cada esquina de cada barrio e incluso vienen de ciudades lejanas y de otros países para ser parte de este atrevimiento que, en base a vestuarios inimitables, carrozas esbeltas, un escenario sonoro impar conforman uno de los desfiles más imponentes a cielo abierto que se vive durante el verano en el país.

El Carnaval en Gualeguaychú está presente en todo el país y no hay localidad por más pequeña que sea, que no se sume a esta gran fiesta, ya sea a través del ejercicio turístico o por la vivencia virtual a través de los medios y las redes sociales. Lo cierto es que nadie es indiferente: he ahí su potencia y su perpetua vigencia.

En verano, el Corsódromo de Gualeguaychú se asemeja a un escenario construido a fuerza de relatos temáticos, de colores, de danzas, de sones, de carrozas monumentales. Todo es asombro. Así, el “José Luis Gestro” se transforma en un coro de voces memorables, cuyos ecos se van disipando por las calles, donde todavía se respira el carnaval con su ingenio y su invitación a continuar celebrando.

El Carnaval del País es uno de los acontecimientos más famosos y multitudinario que ofrece Gualeguaychú y Entre Ríos.

Indudablemente es un desfile donde las cinco comparsas son tan estupendas como sensacionales; pero también son dueñas de una música tan característica como rítmica; con bailarines que contagian a un público que nunca permanece inmóvil en las tribunas; con trajes y vestuarios tan impresionantes como sorprendentes; donde el arte se hace fiesta.  

Es indudable que el Carnaval del País se vive en el Corsódromo. Pero, el carnaval como tal se vive en todas partes de la ciudad: en cada playa, en cada club, en cada barrio, en cada esquina. Quien transite Gualeguaychú lo hará para encontrarse con la música carnavalera a la vuelta de cada esquina, con bailarines anónimos, y una multitud que la hace una fiesta continua.

 

La fiesta en el Corsódromo

 

La séptima noche tuvo la permanente amenaza del frío. Sin embargo, 24 mil almas con sus pasiones, disipó el impasible clima y a pesar del cielo abierto, todo fue calidez y tibieza para el alma y los sentidos.
Cuando hay Carnaval, más se confirma ese sabio dicho popular: “A mal tiempo, buena cara”.

No se trató de “aguantar”, porque vivir el Carnaval nunca puede ser un sacrificio. Es una disposición para que la experiencia de ser testigos de este espectáculo también permita tener la sensación de ser protagonistas. La calidez del público –como el hálito que se estampa en un espejo- es la devolución de la pasión que los artistas expresan a lo largo de los 500 metros de la pasarela.

Ará Yeví -que en lengua guaraní significa “Tiempo de diversión”- inauguró este feriado extra largo de Carnaval. Lo hizo de manera vibrante, con un desplazamiento equilibrado y sin baches.

Lamentablemente al final otra vez una de sus carrozas demoró la salida y con ello retardó la apertura de Kamarr. Una pena, porque había hecho todo bien y otra vez el infortunio le jugó una mala pasada.

En este punto un llamado de atención a la Comisión Directiva. La labor de Prensa se lleva todos los elogios, por tener ese espíritu que todo lo resuelve de la mejor manera. Un aporte al espectáculo que no debe pasar desapercibido. Sin embargo, no ocurre lo mismo con la labor de la Promoción Comercial, porque es notorio que por impulsar a las marcas que acompañan al Carnaval, sus músicas enturbian la escenografía sonora de las comparsas. Y la confusión perjudica de manera notable al espectáculo.

Está muy bien la parte de las marcas comerciales. Lo que está mal es su anarquía al momento de transitar la pasarela, con un volumen que tapa a la banda musical de las propias comparsas y un desplazamiento demasiado lento que es por momento hasta irritante.

Anoche, la perjudicada fue Kamarr por partida doble: la demora de la salida de Ará Yeví; y la propaganda que impedía disfrutar de su banda musical.

La comparsa del Sirio Libanés se ha ganado el fervor del público, que sigue sus canciones –incluso las canta a capela- y luego corona con una batucada que hace deleitar a todo el mundo.

En tercer lugar lo hizo Marí Marí, que tal vez tuvo su mejor noche desde que comenzó el Carnaval. Fue su banda musical la que mejor conectó con las tribunas y sus cuadros de danzas se pudieron lucir como nunca antes.

Es verdad: el Corsódromo explota. Eso es indiscutible, porque eso es carnaval en una de sus expresiones más sublimes. Pero, el carnaval no es solo música, aunque la sonoridad sea un componente esencial.

De todos modos, anoche Marí Marí recuperó sus bríos de “Aplanadora” mostrando su mejor versión 2023.

En cuarto lugar desfiló O´Bahía, que anoche no pudo ofrecer su mejor versión. Justo a la altura donde se ubica el jurado, la carroza de la moto que hace una suerte de metáfora con el Rock de la Cárcel, tuvo un apagón; y para males el sistema de audio funcionó muy mal, con “frituras” que impedían disfrutar de la música.

Lo mejor de esta comparsa se vive con la batucada y la integración con la guitarra eléctrica. Un momento especial se siente en el Corsódromo cuando suenan algunos acordes de “Ji, Ji, Ji” de los Redonditos de Ricota y las tribunas estallan con una ovación.

Por último, Papelitos revalidó sus ansias ganadoras; porque a pesar del frío, del cansancio del público y la alta hora de la noche, volvió a encender el Corsódromo para que la admiración de un público cerrara este primer encuentro de los tres que se han programado para vivir el feriado del carnaval.

 

¿Cómo sigue la fiesta?

 

Restan tres noches: hoy, mañana y el sábado 25 de febrero; más la Fiesta de la Elección de la Reina prevista para el viernes 24.

Las entradas y ubicaciones tanto para el Carnaval como para la elección de la Reina pueden adquirirse a través de www.entradauno.com y en forma presencial, en las boleterías, domingo y lunes de 9 al cierre y el martes de 9 a 13 y de 17 a 21.

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