Se calcula que cada cuero tigre está valuado en el mercado negro en 100 mil pesos. Su comercialización transcurre por canales ilegalmente porque el tráfico de fauna está prohibido en la Argentina.

En el zoológico El Arca de Enrimir, en Concordia, encontraron cinco cueros de tigres de bengala y uno de yaguareté, el gran felino americano, monumento nacional. Fue en un operativo de verificación de establecimientos y fiscalización de planteles faunísticos realizado por Ambiente de Nación en Entre Ríos, en conjunto con Fiscalización de Recursos Naturales provincial.

En la visita que la Brigada de Control Ambiental (BCA) del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Nación realiza a Entre Ríos desde el lunes pasado, además de la Granja de Animales de Avelino Fontana de Paraná tal como informó ERA Verde, también llegó hasta Concordia. En este lugar de la costa del Uruguay, ubicado en el kilómetro 9,5 de la ruta de acceso a Salto Grande, también solicitaron medidas de adecuación del establecimiento y un inventario actualizado de los ejemplares de la fauna silvestre.

De acuerdo a la información oficial, los inspectores dieron cuenta del faltante de animales exóticos y autóctonos, como así también irregularidades en la documentación que acrediten la tenencia legal de los mismos, los registros de posibles bajas, certificados de necropsias. Además, se detectaron irregularidades en algunas guías de tránsito, se detalló.

Pero lo que resultó llamativo en los inspectores es la ausencia de siete tigres de bengala, dos osos, dos yaguaretés, en comparación con el último registro habilitante del establecimiento expedido por la provincia en octubre de 2018. Tampoco, si es que hubieran fallecidos, se informó sobre sus decesos; no había constancias de baja ni de veterinario.

Sí se hallaron cueros de animales de fauna silvestre: cinco de tigres y uno de yaguareté que fueron decomisados por la Brigada de Control Ambiental y trasladado a Buenos Aires, ya que no poseían documentación y no serían pertenecientes a los ejemplares faltantes en los censados hace dos años atrás. Uno de los cueros de tigre estaba fresco, conservado en un freezer.

Además de los 7 tigres de bengala extraviados, tampoco fueron hallados en el lugar 2 osos pardos y 2 de las tres corzuelas datados anteriormente.

De acuerdo a las averiguaciones de ERA Verde, esta vez el inventario constatado consistió en: 2 yacarés, 4 loros barranqueros, 8 loros habladores, 2 loros choclero, 2 agapornis, 2 cocotillas, 1 mono tití pincel, 7 gallinas de guineas, 2 faizanes dorados, 1 mono carayá, 1 coatí, 6 pavos reales alvinos, 19 pavos reales, 1 corzuela, 1 mono pampion, 1 llama y 1 yaguareté.

Según trascendió extraoficialmente, la idea es llegar a un cierre y clausura ordenada del lugar –algo que le compete a Recursos Naturales provincial–, con el traslado adecuado de los animales ya que, se recordó, en el mismo lugar falleció Mary, una elefanta de 62 años de edad que en diciembre de 2018 aguardaba de ser llevada a un santuario en Brasil.