El gobernador de la provincia, Jorge Busti, se reunió esta mañana con los representantes de los tres gremios docentes que firmaron el acta acuerdo, en el marco de la Mesa de Diálogo y Consenso. En tanto, el ministro de Gobierno, Justicia y Educación, Sergio Urribarri, calificó el encuentro como “clave”, y dijo que “sirvió para afianzar una relación de trabajo para buscar consenso en la elaboración de una nueva Ley de Educación que contemple los cosas necesarias para mejorarla”. Además, cuestionó a la dirigencia de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER): “Es difícil explicar cómo un grupo de dirigentes con tan poco poder de convocatoria pretenda mantener en jaque a la educación en toda la provincia”.
De encuentro participaron los representantes del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), la Unión Docentes Argentinos (UDA) y la Asociación del Magisterio de la Enseñanza Técnica (AMET), quienes se reunieron con el gobernador Busti, el ministro Urribarri y el vicegobernador de la provincia, Guillermo Guastavino. El cónclave sirvió para ratificar el acta acuerdo firmado el viernes último.
A la salida, Urribarri expresó que “el encuentro fue clave, importante y productivo, porque sirvió para afianzar una relación de trabajo en búsqueda de consensos. El gobernador se dirigió a los maestros y en la reunión de hoy se incorporaron otros sectores”, señaló en declaraciones periodísticas.
Más adelante, dijo que “con esta reunión dimos el primer paso en una tarea que nos llevará un buen tiempo, pero falta que se sumen otros sectores e instituciones que están interesadas en sumar esfuerzo para mejorar la educación, como la Iglesia, los estudiantes secundarios, productores, y otros”.
Por otra parte, respondió a las críticas de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER), que no fue convocado a la nueva Mesa de Diálogo y Consenso y tildó al encuentro como un intento para deslegitimar su protesta, al manifestar que “no conformamos esta mesa para contrarrestar ningún paro sino para elaborar una nueva Ley de Educación que contemple las cosas necesarias para mejorar la instrucción de los chicos entrerrianos”.
Al ser consultado sobre los índices de acatamiento al paro realizado por AGMER, el funcionario dijo que “la mayoría de los docentes entrerrianos fue a trabajar y la sociedad lo agradece. Pero estamos tristes porque hoy al final del día habrá más de 100.000 niños, la mayoría humildes, sin clases como resultado de la intemperancia y la crueldad de una dirigencia”.
Si bien reconoció que “los docentes son libres de accionar, deben saber que los días de paro no se pagarán y el gobierno está dispuesto a poner en blanco sobre negro, ante la comunidad, las actitudes mesiánicas de cierta dirigencia gremial del sector”, para luego explicar que “el gobernador nos ordenó que no especulemos con el aumento ofrecido a los maestros. El dinero está y el gobernador quiere que vaya inmediatamente al bolsillo de los 32.000 docentes y 9.000 jubilados del sector, a pesar de los desvaríos de la dirigencia de AGMER”.
Finalmente, Urribarri expresó que “espero que esta situación dolorosa, tensa y cruel para muchos chicos les haya servido para reflexionar y para que los dirigentes de AGMER se reubiquen en su rol específico. El gobierno considera tener una relación excelente con el maestro e interpretar su sentir, así que seguiremos mirando adelante y trabajando por una educación de calidad para todos nuestros niños y jóvenes”, y sentenció: “Es difícil explicar cómo un grupo de dirigentes con tan poco poder de convocatoria pretenda mantener en jaque a la educación en toda la provincia”.