Zaccaria de profesión médico anestesista, militar retirado; y en el año 1978 se desempeñaba como Jefe de Terapia Intensiva, está procesado y con prisión preventiva en la causa “Trimarco Juan Carlos Ricardo y otros s/sup. Inf. Arts 139 inc. 2° y 146 siguientes y concordantes, todos del Código Penal de la Nación (Ley 11.179), conocida como “Hospital Militar”, donde está comprobado que funcionó una maternidad clandestina.
El hecho por el cual está procesado consistente en la presunta sustracción y sustitución de identidad, de dos menores de edad, neonatos, gemelos o mellizos, hijos de los compañeros detenidos-desaparecidos Raquel Carolina Ángela Negro y Julio Valenzuela, los cuales nacieran en cautiverio, entre fines del mes de febrero y principios del mes de marzo del año 1978, en el Hospital de Evacuación 121- Hospital Militar de esta ciudad de Paraná, funcionalmente en actividad dentro de la formación dependiente del Comando del Segundo Cuerpo de Ejército Argentino con asiento en la ciudad de Rosario, Provincia de Santa Fe, en ocasión del traslado que se efectuara a la misma, en estado de embarazo avanzado y bajo privación ilegítima e ilegal de su libertad, desde alguno de los centros clandestinos que existieran en la ciudad de Rosario denominados " La Quinta de Funes" O " La Intermedia " hasta el nosocomio local indicado, donde se atendió, al momento de dar a luz, a Raquel Negro bajo el régimen clandestino de detención en el cual se encontraba.
Con el avance de la causa, que iniciara Guillermo Germano, cuando estaba al frente del Registro Único de la Verdad en el año 2005, se cuenta con numerosas declaraciones testimoniales que dan cuenta de las circunstancias en las cuales se desenvolvieran los acontecimientos y en particular la intervención especial de Zaccaría.
“Luego de su procesamiento el 3 de septiembre del 2008 en el cual se dispuso la prisión preventiva, la familia Negro y Valenzuela puedo reencontrarse con Sabrina, después de 30 años de búsqueda inclaudicable. El 23 de diciembre de ese mismo año al encontrarnos con nuestra hermana Sabrina, renovamos el compromiso, junto a su hermano Sebastián y los hermanos Gustavo y Diego López Torres, de continuar la tarea de buscar a los 400 jóvenes que aún no conocen su verdadera identidad y en particular a los que nacieron en la maternidad clandestina que funcionó en Paraná. Porque lo imposible sólo tarda un poco más”, mencionaron los integrantes de la asociación HIJOS.
Fuente: APF