Adán Bahl no descartó ser candidato en el 2025, pero aclaró que no es una prioridad y en cambio bregó para que lo sean aquellas “personas que mejor nos representen, que puedan trabajar en sintonía con la provincia y defender los intereses de los entrerrianos”.
De ANÁLISIS
El ex candidato a gobernador y ex intendente de Paraná, Adán Bahl, analizó la realidad política de la provincia y en especial la gestión de Rogelio Frigerio.
En el programa “Cuestión de Fondo” (Canal 9, Litoral) reconoció que está volcado a la actividad privada y si bien destacó la importancia la vocación por el servicio público, admitió que no extraña tanto la vertiginosa agenda; aunque resaltó que la agenda diaria es tal vez lo que más añora.
Bahl sostuvo que “el peronismo está en una situación de falta de identidad, desorganizado”. Pero, del mismo modo también enfatizó que cree “que es una gran oportunidad. (…) partiendo desde cero, todos iguales, todos vengan, los que se fueron, los que no se fueron, los que perdimos, los que ganaron. Bueno, buscando un poco esta mística de reunirnos y repensar hacia adelante”.
En ese contexto, destacó que en el peronismo no están dadas las condiciones para que desde la conducción nacional de quiera –como ha ocurrido tantas veces- manipular los candidatos entrerrianos. Pero, aclaró que ello “implica tener la épica de movilizarnos y poder hablar. Lo contrario sería languidecer y esperar que alguien con el dedo que tenga la birome arme las listas”.
En otro tramo de la entrevista en “Cuestión de Fondo”, Bahl minimizó la baja de la inflación y explicó que era previsible, y advirtió que “estamos incorporando, en términos de dólares, costos muy altos, sobre todo al sector productivo”.
También compartió que ya no llegan consumidores uruguayos por la distorsión económica que impera la realidad argentina. “El PBI y el crecimiento es muy simple, son cuatro cosas: es el consumo, es la inversión de carácter privado; el gasto público, que incluye la inversión pública; y es las exportaciones menos las importaciones. El consumo, cae. Las inversiones de gran nivel, estamos hablando de 15, 20, 30 mil millones de dólares, no las veo por ningún lado. Y cuando vienen, dicen que lo van a invertir en 10-15 años. El gasto público, bueno, el emblema del presidente es la motosierra. Hay una tremenda restricción. Y el tema de exportación e importación es todo un capítulo aparte. Por lo tanto, no hay plata. Al no haber plata, inmediatamente cae toda la actividad, describió.
Lo otro que expresó es que no descarta ser candidato en las elecciones de medio término del año que viene, aunque no es su prioridad. “Toda la aplicación de tiempo a la política lo hago para aportar, pero no tengo una meta inmediata para ser candidato el año que viene, por lo menos en este contexto. Lo que sí voy a intentar es que sean las personas que mejor nos representen, que puedan trabajar en sintonía con la provincia y defender los intereses de los entrerrianos”, resaltó.
-Cómo anda con la profesión de contador y con la política. ¿No anda aburrido?
-No, no. He vuelto definitivamente al llano, dedicado a la profesión, a la política y, bueno, con mucho entusiasmo. Así que, aburrido no.
-Pero no diga que no extraña que lo llamen todos los días, que le manden un mensaje todos los días, en su rol de intendente. Algo debe extrañar. En algún momento debe despertarse, así como diciendo, tengo que ir al municipio.
-Sí, sí. De hecho, me ocurrió hace muy poco con una lluvia, una tormenta muy grande. Me desperté a la madrugada y dije, ¡uy!, qué problema. Bueno, definitivamente, el Municipio toma la rienda del asunto. Y al principio, los primeros días sí sentía eso, porque es increíble cómo cuando uno se va de la gestión, automáticamente se cortan los mensajes; hay otras responsabilidades a cargo de otras personas y eso se extraña un poquito, pero no, ahora no, definitivamente, no.
- ¿Qué es lo que más extraña de ese trajín?
-Definitivamente era el desafío diario, ¿no? Cuando llegamos, teníamos una situación bastante complicada, había que planificar, había que asumir responsabilidades y el objetivo era transformar el lugar… en definitiva donde nosotros mismos estamos viviendo. Y tal vez hoy lo más importante –sinceramente- es cuando uno anda por la calle, yo trabajo todo el día y también me muevo permanentemente.
- ¿En qué trabajas todo el día? ¿Cuántas empresas, cuántos clientes tiene?
-Varios clientes, no acostumbro a hablar…
- ¿No es lo mismo que tenga 5 o 20?
-El número no importa. Lo importante es que puedo vivir muy bien. Hay mucho trabajo, la verdad, mucho trabajo de asesoramiento, de impuestos, de mercado de capitales. Y la verdad es que me pude reubicar rápidamente en los primeros meses.
- ¿Y un empresario confía plenamente en un contador que hacía mucho tiempo no ejercía la profesión?
-Sí. Lo que sucede es que no me desentendí, por ejemplo, tengo casos de empresas que tienen problemas en otras provincias con cuestiones vinculadas a impuestos locales, lo que sería la ATER provincial. Provincias que tienen muchísimos vericuetos, bueno, son temas puntuales que hay que tomarlo, analizarlo, estudiarlo. Muchas veces trabajar con algún contador del lugar, porque cuando uno va desde la provincia sin estar matriculado en esa provincia siempre hay una situación de revancha, pero bueno, se plantean los objetivos, se cobran los honorarios y se le busca la solución.
- ¿Le ha pasado que ha tenido que ir a otra provincia como contador?
-Actualmente, sí, sí, sí, definitivamente.
-Y cuando usted llega le dicen, ¿usted no era candidato a gobernador? ¿No era el vicegobernador de la provincia?
-No, no, no, para nada, porque ¿qué es lo que se hace en ese momento? Todo el trabajo práctico se hace en la provincia y como uno no está matriculado en esa provincia, trabaja con un contador del lugar, porque también se genera esa situación cuando uno va de una provincia a otra, son situaciones complicadas sobre todo con los organismos de recaudación. No, no, pero nunca me ha pasado ese reconocimiento, no ha pasado desapercibido por lo menos en los lugares donde he estado.
- ¿Y es mejor o es peor?
-Es natural, es normal, para mí es absolutamente normal. Hoy estoy activo en la profesión, activo en la política, si bien creo que el peronismo está en una situación de falta de identidad, desorganizado, también creo que es una gran oportunidad. Así que bueno, siempre con una consigna la que estoy repitiendo: partiendo desde cero, todos iguales, todos vengan, los que se fueron, los que no se fueron, los que perdimos, los que ganaron. Bueno, buscando un poco esta mística de reunirnos y repensar hacia adelante.
- ¿Y cómo le cayó este reposicionamiento de Cristina Fernández, como nuevamente jefa del peronismo, donde hay un reposicionamiento de sectores vinculados a ella?
-Muy natural y muy normal y muy propio de ella, diríamos. De alguna manera, creo que cada una de las acciones que lleva adelante las tiene planificadas. El hecho de la sentencia del día de hoy, siendo una mujer sumamente fuerte, va a redoblar los esfuerzos en ese sentido y va a seguir adelante. Así que como sorprender no me ha sorprendido, y en esto de la falta de identidad y la falta de organización, toma la posta, va hacia adelante.
-Nos referíamos a que ustedes venían haciendo una serie de reuniones. Y a esas reuniones “La Cámpora” no era convocada. No había referentes de “La Cámpora” en esos encuentros. Y ahora es como que ustedes, de alguna manera, si siguen con esa programación tendrán que invitarlos.
-La agrupación “La Cámpora” es una agrupación, no es el peronismo. El peronismo mucho más que eso. A mí, en Entre Ríos, en la política, no me conduce nadie. Por lo tanto, yo hablo con todos. Voy a reuniones, hago el esfuerzo físico, se utiliza el Zoom y se hace el esfuerzo de hablar con todos. Después, la política es como en la música. Los cantores se juntan definitivamente por la tonada. Pero, en esta etapa es un hablar con todos. Los que están, los que se fueron, independientemente, diríamos, de qué sector o qué agrupamiento pertenezcan. Yo no participé en la cuestión interna partidaria a nivel nacional, ni con un sector, ni con otro sector. Ni tampoco me invitaron a integrar, ni formar parte. Pero, obviamente, lo respeto. Eso ya está definido. A seguir adelante.
El gobierno provincial
- ¿Cómo está mirando el gobierno de Rogelio Frigerio?
-No tengo mucho que opinar.
-Sabemos que tiene buena relación con el actual gobernador.
-Sí, sí. Muy buenas relaciones.
-Nos han confiado que en algunas instancias incluso lo han consultado, algunos funcionarios le pidieron opinión. ¿Eso es así, realmente?
-Sí, sí. Con todo respeto, sí. Y le doy mi visión y eso no quiere decir que sea la verdad. De hecho, la experiencia que he tenido de muchos años en la gestión como profesional, bien estando a cargo no solamente de cuestión política, sino de la parte administrativa, es que tengo una visión muy amplia. Yo veo que es un gobierno que no está haciendo olas, que todavía está yendo, de alguna manera, a mitad de máquina. Y, bueno, habrá que ver un poquito más adelante, todavía no han cumplido un año, cuáles son los resultados en este contexto nacional tan difícil, no para manejarse para un gobernador que muchas veces recibe crítica para actuar de una manera u otra, pero en definitiva tiene que tener la responsabilidad de manejarse, porque él es quien tiene la responsabilidad de tener la relación con el gobierno nacional. Y ya vimos en Entre Ríos cuándo un gobernador se pelea con la Nación, cómo le fue. Así que es un momento difícil, se ve claramente en los presupuestos, se ve claramente en la no transferencia de recursos que antes era normal y habitual, y tienen que atenderlo los municipios, tienen que atenderlo la provincia. Se ve claramente en la obra pública. Pero, bueno, hay una legitimación en el presidente, producto de haber participado en un proceso democrático, y en algún momento va a llegar en donde las realidades y las necesidades ya no se van a poder ocultar más con difamaciones o control. Creo que a partir de ese momento la gente va definitivamente a evaluar en función, no de argumentos, sino evaluar en función de resultados.
-Esa relación que tienen determinados hombres del gobierno con usted no la tienen con Gustavo Bordet. ¿Es consciente de eso? No hay críticas hacia usted, pero...
-Pero, yo estaba de intendente (de la Municipalidad de Paraná), tampoco tiene que haber muchas críticas.
-No. Pero, por eso sorprendió que remarcaban esa buena relación que hicieron con usted, pidiéndole opinión como político y ex intendente.
-Nosotros preparamos una campaña con un gran equipo, con experiencia, con ideas, ¿qué voy a hacer yo con esas ideas? ¿Me las voy a guardar para dentro de tres años, dentro de siete años?
-Recordamos el gesto que tuvo de acercarles esas ideas.
-Sí, algunas cosas se toman, otras se toman y se dejan... pero, está perfecto. Soy una persona que va por la vida desde una perspectiva positiva. Entonces, si me piden una opinión o yo tengo una idea y la puedo dar, y la voy a dar. Reitero, no me puedo guardar los conocimientos de la idea para ver si en tres años o en siete años tenemos la posibilidad. La provincia tiene que ir bien, no nos podemos quedar parados. Demasiado difícil está la situación para lo que estamos en política como para que estemos con actitud de mezquina.
- ¿Y qué cosas le cuestiona a Frigerio y su equipo?
-Lo dije recién, implícitamente. Veo que aún está como a media máquina. Esto puede ser el proceso también de una cuestión de restricción económica, de restricción financiera, también el de amoldarse los equipos para asumir determinadas responsabilidades. Muchas veces se ponen funcionarios que luego habrá que cambiar, seguramente en algún momento efectúan ese cambio.
- ¿Usted considera que hay funcionarios que a Frigerio no le están funcionando?
-No, yo no voy a decir eso.
-Usted dice que es el primer año, pero se sabe también que en el primer año todo gobierno tiene una impronta y una fuerza.
-Creo que la gente a los gobiernos provinciales no le pide demasiado. ¿Qué le pide? Que paguen los sueldos. Está pagando los sueldos. ¿Qué le pide? Tener clases, no tener conflictos con los docentes. Bueno, hoy definitivamente, ese tema quedó para atrás, es un tema importante. Hacer dos o tres obras de infraestructura importantes, sobre todo aplicadas al sector productivo, que generen valor agregado. Que funcione relativamente el sistema de salud; que la Policía brinde seguridad. No le pide muchísimas más cosas. Entonces, hoy yo no tengo cosas ni para hablar bien, ni para hablar mal. Más adelante, en función de los resultados, podre dar una evaluación. Sí veo que, a los gobiernos locales, sobre todo, se les exige muchísimo más, porque está el servicio diario, la necesidad permanente de todos los días. Bueno, a veces se puede resolver, a veces se demora en la solución. Pero, siempre se busca la forma de resolverlo. Y bueno, el gobierno municipal está haciendo una muy buena gestión.
Diálogo con Rosario Romero
- ¿Habla mucho con la intendenta de Paraná, Rosario Romero?
-No hablo mucho, pero sí tengo un diálogo de respeto. Estuve viendo el presupuesto y lo estuvimos analizando, incluso con algunos profesionales. Es un presupuesto muy equilibrado, que tiene una partida de personal que oscila en un 50%. Es un presupuesto de 168 mil millones de pesos y una partida de personal de 84 mil millones de pesos. Esto habla de que hay un importante monto para arrojar a lo que es el desarrollo económico. Pero, bueno, no va a poder el municipio afrontar las grandes obras que en su momento nosotros planificamos, como el Planetario para la cuestión vinculada a la Educación y al Turismo; los desagües pluviales como el Arroyo Las Viejas, Calle Juan B. Justo, que la dejamos con contratos firmados, Jorge Newbery y Miguel David. Son obras increíblemente costosas. La nueva planta potabilizadora, el centro distribuidor Sur, todas obras que estaban financiadas por el Gobierno Nacional y se ha retirado. Hoy, si bien es un buen presupuesto, seguramente va a estar destinado básicamente al mantenimiento y a la prestación de servicios. Pero, concretamente el diálogo es correcto, es bueno y es positivo totalmente.
-Usted ha sido muy cauto respecto de la opinión del gobierno de Frigerio ¿Tiene opinión diferente de este primer año de Javier Milei?
-Sí, totalmente. Creo que destaco de los últimos resultados, porque siempre tiendo a ver resultados. Estamos viendo que la inflación va disminuyendo, una cuestión que es relativamente importante.
-Paréntesis, ¿le sorprendió eso? Porque parece que uno de los principales “logros” de Milei es esta cuestión de la inflación. Se podrá estar o no de acuerdo en lo cruel del ajuste, pero la inflación la logró bajar. Realmente sorprendió que haya podido lograr eso en este tiempo.
-Económicamente era totalmente previsible que la inflación iba a caer, y de hecho viene cayendo ya desde principios de año. Producto de, sobre todo, restricciones y de los motores de la economía que no están funcionando. Cuál es el problema que yo advierto claramente: estamos incorporando, en términos de dólares, costos muy altos, sobre todo al sector productivo. A ver, para que se entienda, es como que existe una inflación en pesos relativamente baja, a lo que estamos acostumbrados, pero existe una inflación en dólares muy alta que castiga el costo del sector productivo. Eso hace que no sean competitivos nuestro sector productivo y que también lime lo que son las utilidades del sector servicios. Eso va a ser un inconveniente a mediano plazo que el gobierno debería atacar. Y para que se entienda bien qué es lo que está ocurriendo, podemos preguntarle a cualquier comerciante de la costa del Uruguay, a los Gualeguaychú, Concordia, Colón, si siguen viniendo los uruguayos. No viene nadie. ¿Por qué? Porque estamos muy caros. ¿Muy caros en qué? Muy caros en dólares. Y esto genera una gran distorsión para los uruguayos. Por supuesto. Y eso va a generar una gran distorsión. Por lo tanto, ahí tiene que aplicarse. El PBI y el crecimiento es muy simple, son cuatro cosas: es el consumo, es la inversión de carácter privado; el gasto público, que incluye la inversión pública; y es las exportaciones menos las importaciones. El consumo, cae. Las inversiones de gran nivel, estamos hablando de 15, 20, 30 mil millones de dólares, no las veo por ningún lado. Y cuando vienen, dicen que lo van a invertir en 10-15 años. El gasto público, bueno, el emblema del presidente es la motosierra. Hay una tremenda restricción. Y el tema de exportación e importación es todo un capítulo aparte. Por lo tanto, no hay plata. Al no haber plata, inmediatamente cae toda la actividad. Y obviamente, deja de presionar sobre los productos la falta de dinero. Por eso, cae dentro de una de las razones. Y la no emisión, que va a ir también por el déficit cero, la inflación. Pero, eso no quiere decir que vamos a estar muy bien dentro de seis meses. Van a tener que seguir tomándose medidas para que rebote la economía y la gente empiece a invertir, que haya un movimiento económico y se generen puestos de trabajo; que es literalmente lo que nosotros hicimos los cuatro años en el municipio. Por supuesto, a nuestra escala.
El año electoral que se aproxima
- ¿Y cómo considera que va a estar electoralmente el peronismo el año que viene, si Milei crece en su imagen y no se sabe qué puede pasar con Cristina?
-Las elecciones, si bien son nacionales, van a ser disputadas localmente. Yo digo que de alguna manera las elecciones son como (los alimentos) en los aviones: pasta o pollo, va a ser a favor de Milei o en contra de Milei. Vamos a ver cómo llega la economía en ese momento. Creo que va a llegar una tasa de inflación baja, pero va a llegar con una gran necesidad. Y la realidad va a ser justamente que la gente empiece a evaluar –como dije anteriormente-, resultados para tomar la decisión y no argumentos, como está haciendo hoy. Milei fue muy inteligente, pudo determinar que la gente estaba más molesta con el peronismo de lo que nosotros creíamos. Y hoy vemos que las empresas tienen esperanzas, que la gente tiene paciencia, pero todo va a tener un límite. Todos los gobiernos lo tuvieron y este no creo que sea la excepción. Y con respecto a lo político provincial, tendrán que darse las deliberaciones, las charlas. Cuando hablaba hoy de salir, de partir desde cero, y todos en igualdad de condiciones, sumar a todos… implica tener la épica de movilizarnos y poder hablar. Lo contrario sería languidecer y esperar que alguien con el dedo que tenga la birome arme las listas
-Cosa que ya ha pasado con Cristina Conducción.
-Ha pasado muchas veces, pero hay que evitar eso, no puede seguir ocurriendo. Así que bueno, va a ser muy interesante.
- ¿Ustedes consideran que se puede resistir, como dirigentes de Entre Ríos, a las directivas desde el poder central?
-La mayoría de las personas que nos hemos reunido están absolutamente convencidas en ese sentido. Claro que sí, exactamente. Para eso hay que hablar, hay que dialogar y ponerle mucha fuerza.
- ¿La militancia le siguen exigiendo autocrítica?
-Sí, por supuesto. Creo que nunca le hicimos a la autocrítica. Nunca la hicimos. Por distintas razones no la hicimos. Pero, eso también forma parte de lo que decíamos recién. Un poco la pérdida de identidad, un poco la falta de organización. Por eso, insisto en que debemos empezar desde cero, todos en igualdad de condiciones, y empezar a hablar y a discutir para reprogramarnos y repensar. Veremos hacia adelante, seguramente en las listas habrá una discusión amplia, habrá posibilidad de tener PASO.
- ¿Usted está dispuesto a meterse en la grilla de precandidatos o de candidatos legislativos?
-Yo no lo descarto, pero no lo tengo como una prioridad. Toda la aplicación de tiempo a la política lo hago para aportar, pero no tengo una meta inmediata para ser candidato el año que viene, por lo menos en este contexto. Lo que sí voy a intentar es que sean las personas que mejor nos representen, que puedan trabajar en sintonía con la provincia y defender los intereses de los entrerrianos.
Transparencia en el Parlamento provincial
-Uno de los puntos fuertes de este gobierno provincial fue la decisión política que adoptaron en la Cámara de Diputados y en la Senadores –fallo judicial mediante por la promoción de un amparo pidiendo acceso a la información. la difusión de quiénes son los contratados y quiénes son los que está en planta permanente. Si bien hubo al principio resistencia, luego de la intervención de la Justicia se cedió y metafóricamente “no se murió nadie”. Es decir, se podía hacer.
-Y está perfecto.
-Sí, pero ustedes no lo hicieron. Ni usted, ni Laura Stratta, ni Ángel Giano.
-A mí nunca me lo requirieron de manera tan contundente como se requirió en este momento.
-Le va a crecer la nariz como a Pinocho…
-No, no, por lo menos no recuerdo que haya tenido una evaluación.
-Pero, podía haber sido una decisión política sin que nadie se lo requiera.
-Sí, lo que pasa es que ahí empiezan las Legislaturas, que es un cuerpo colegiado. No es que el presidente decide… Pero, bueno, bienvenido, ahora son públicos, todo el mundo lo puede ver. No hay ningún problema, como ustedes decían (metafóricamente) “nadie se murió”. Y así debería ser con todo.
-Igual hay un llamado de atención porque lo que se conoció es hasta el 31 de julio. Pero, deben informar de manera trimestral. Pasó agosto, septiembre, octubre. Estamos a 13 de noviembre. Debería haber una página actualizada y no está pese a que han transcurrido trece días.
- ¿Hay una obligación trimestral?
-Claro, hay un compromiso trimestral…
-Me parece que eso es lo más prudente, sobre todo para evitar sospechas, comentarios. Y aparte, la mayor parte, o por lo menos todo lo que yo conozco, van y prestan servicios. ¿Cuál es el problema de que tenga un contrato? Tiene una contratación legítima, legal.
Abandono de dirigentes peronistas
- ¿Qué opinión tiene de los dirigentes peronistas que se abrazaron al gobierno de Frigerio a través del ministro de Gobierno y Trabajo, Manuel Troncoso? ¿Le preocupa?
-No, no me preocupa para nada.
- ¿Qué quiere decir?
-Yo tuve 10 años de ministro de Gobierno. Nunca me dediqué a eso, ni menos a sacarme fotos para mostrarlo. Me dediqué a lo que es la responsabilidad. En ese momento tenía que llevar adelante un liderazgo basado en el conocimiento porque respondía a una organización que era el gobierno provincial. No era el que tomaba las decisiones de la visión de la organización. Pero, me encargaba que todo lo que fuera del Ministerio fuera eficaz, eficiente y funcionara. Y dentro de las prioridades no tenía esta situación. Está dentro de las reglas de la política. Si me parece que es una prioridad que debería tener un ministro de Gobierno, yo no lo haría. Pero lo respeto.
- ¿Hablan contra Troncoso?
-Con Troncoso no hablo y tuve la oportunidad de tener un solo momento.
-Era un hombre del peronismo hasta el 2016 cuando se desafilió.
-Sí, sí, pero tengo el mejor de los respetos por él. Sé que es una persona trabajadora. Siempre me cuentan: lo hablo con Troncoso, “me lo resolvió”. Está todo bien. Pero a la pregunta concreta no es algo que yo haría salir a buscar. Sobre todo, porque también debe haber muchísimas promesas incumplidas de gente que aportó al proyecto y que todavía no le han atendido el teléfono. Pero, bueno, es otro partido, es el gobierno. Yo no tengo por qué opinar. Si me preguntan qué haría, personalmente no lo haría.
Elecciones intermedias nacionales 2025
- ¿Le debería preocupar al peronismo que en las próximas elecciones Milei y Frigerio puedan ir en un acuerdo político en la provincia?
-Para nada. De hecho, creo que va a ser así. No tienen opción porque si no, el peronismo va definitivamente a ser la mejor opción. Ellos van a ir juntos. No hay información, es una suposición.
- ¿Usted está queriendo decir que si no hay un acuerdo ustedes ganan las la que vienen?
-Creo que sí porque de alguna u otra manera componen el mismo perfil del elector. Es una cuestión numérica, aritmética. Entonces, por inteligencia, tanto del gobierno provincial como el gobierno nacional, lo más conveniente es que vayan juntos. Creo que lo más probable, 99 a 1, van a ir juntos. Nosotros tenemos que ir con nuestra propuesta, con nuestros candidatos y en un contexto, como fue el año pasado, que va a determinar si la gente va a acompañar o no. En este caso, o va a votar a favor o no a favor de Milei. Porque en las elecciones de medio término es así. La gente tiene muy en cuenta el bolsillo y mira mucho al gobierno nacional. Y los candidatos, obviamente, tienen que ser candidatos con potencia. Pero, el contexto va a ser fundamental. Ya pasó en el 2017 y ya pasó en el 2021.