Desde que estalló la crisis económica y Cambiemos comenzó a perder las elecciones provinciales que sucedieron antes de las PASO del 11 de agosto, la grieta interna del gobierno entre el ala política y el grupo conducido por Marcos Peña y Elisa Carrió recrudeció. Esto derivó en que diferencias entre algunos dirigentes comiencen a ser más explícitas y ciertas opiniones que antes silenciaban, comenzaron a ser públicas.

El caso más emblemático es el de la diputada nacional Elisa Carrió y el diputado nacional Nicolás Massot, que junto a Emilio Monzó marcaron las profundas contradicciones que había en el oficialismo en la Cámara Baja. El primer cruce fue en mayo, cuando la legisladora de la CC-ARI insultó al presidente del bloque del PRO por la derrota electoral en Córdoba, donde el candidato fue Mario Negri.

“Sabía que eras pícaro, pero no tan hijo de puta”, le dijo Carrió, a lo que Massot replicó: “¿Cómo me dijiste?” Y la diputada insistió: “Hijo de puta”, según publicó Infobae.

Luego, a fines de junio, el diputado, que ahora se encuentra con licencia cursando una maestría en Estados Unidos, la fustigó en una entrevista radial: “En los últimos años a los argentinos nos ha tocado ver la peor versión de Carrió. Ha sido la persona que más ha cuestionado y mellado la autoridad presidencial en todo este tiempo”.

Ahora, la interna tuvo un nuevo round, esta vez a través de las redes sociales. Quien reavivó la pelea fue Carrió, con un tuit sin nombrar a nadie, pero dejando claro quiénes eran los destinatarios: “Hay que ser muy duros en la defensa de la República y en los valores de la convivencia y la unidad nacional. Dejemos a los blandos las conversaciones con Fernández y Massa para entregar la cabeza de Macri. Viva la República! Viva Mauricio Macri y Miguel Ángel Pichetto”.

Este mensaje también iba dirigido a Rogelio Frigerio y Emilio Monzó. Al ministro del Interior lo había criticado abiertamente días atrás en el cierre de un acto: “Fíjense lo que hace el gobierno nacional, yo no entendía por qué, porque Frigerio esconde muchas cosas, total a mí no me importa Frigerio. Además nos entregó en toda la Nación, así que no me importa. Porque hizo de los candidatos del PJ candidatos del gobierno”.

Inmediatamente, Massot, que almorzó con Massa en Nueva York, recogió el guante: “Terminemos con esta farsa! Quien más pregona la República en Argentina es quien más la daña. Sin diálogo ni tolerancia nunca habrá unidad de los argentinos. Quien hoy pide sostener a Pichetto, ayer lo acusaba de encubridor y obstruía cualquier acuerdo”.

Y agregó: “Algunos, en cambio, siempre apostamos al camino de la unidad nacional bajo la conducción del presidente Macri. La intolerancia, mezquindad y vanidad de unos pocos malograron el momento histórico que tuvo Argentina para ese objetivo”.

“Hoy no es tarde, pero es hora de que quienes apostaron a dividir la Argentina por una estrategia electoral hagan su autocrítica y entiendan que un segundo mandato debe venir con la grandeza y amplitud que nuestro país en crisis y su gente reclaman. Basta de tanta hipocresía!”, completó.