El ex diputado Lisandro Viale (PS) analizó el comienza del juicio por corrupción contra el ex gobernador Sergio Urribarri y recordó las dificultades que afrontó al ser de los pocos legisladores que denunció y cuestionó los manejos del ex mandatario.  

En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Viale recordó que “no fue sencillo estar en una Legislatura en minoría numérica y con semejantes dirigentes políticos que hoy están sentados en el banquillo de los acusados, como (José) Allende y (Sergio) Urribarri” y también mencionó que “hay una cantidad de pedidos de informes presentados en la Legislatura en su momento, incluido el de Rogelio Frigerio por su mega negociado en Villa Paranacito para hacer un barrio privado en su campo con fondos públicos, y hoy lo vemos como el porteño que viene a salvar a los entrerrianos”.

Apuntó que “el peronismo aparece como protagonista de todos estos hechos de corrupción que duelen y la sociedad entrerriana por acción u omisión hemos seguido convalidando ese accionar”.

Ante esto, deseó que “ojalá la justicia –que hasta acá lamentablemente no está dando demasiadas muestras de hacer su rol- los meta presos, porque ahí deberían estar todos por haber hipotecado el presente y el futuro de cientos de miles de entrerrianos”.

No obstante este deseo, lamentó que “en lugar de eso Sergio Urribarri no sólo tiene una embajada sin tener ningún antecedente para ser embajador, sino que tiene dos: en Israel y Chipre”. “Es decir que no están presos sino libres y encima ostentan una fortuna mal habida y así sigue el carnaval entrerriano y argentino”, sentenció.

Consultado por las presiones del urribarrismo, afirmó: “Ese tiempo de trabajo en la Legislatura no fue sencillo y no está buena esta situación porque no deja de ser indignante. En mi caso personal no me sucedió ninguna presión concreta con los campos de mi propiedad, pero hacen sentir su dureza desde la cuestión política y el aislamiento por sobre todas las cosas”.

A la hora de analizar el acompañamiento de la gente que vuelve a votar a estos dirigencia pese a las causas judiciales, sostuvo que “la confusión no está solamente en la clase dirigente del país, está en la sociedad argentina porque los jueces, los políticos, los policías, los periodistas, los ingenieros, todos salimos del seno de esta sociedad y si convalidamos esto en quienes nos representan, es porque desde algún lugar estamos ejerciendo este qué me llevo de un Estado que está completamente agotado de su ineficiencia y de su saqueo. El problema es que el que está arriba saquea mucho y el que esta abajo se lleva el cenicero del escritorio de su oficina”.

“A ese mal endémico que tenemos como sociedad argentina que algún vamos a tener que poner sobre la mesa para encontrar una salida hacia un lugar distinto, hay que darle prioridad, un tratamiento y tomar conciencia ciudadana de lo que nos está pasando”, planteó.