(De ANÁLISIS)

El ex presidente de la Caja de Jubilaciones Daniel Elías, que también es empleado del organismo, fue uno de los alcanzados por los controles de personal dispuestos por el gobierno de Rogelio Frigerio. Radicado en la provincia de Buenos Aires, en los últimos días de la gestión anterior consiguió una adscripción para no volver a trabajar a Entre Ríos, pero las nuevas autoridades se la dieron de baja por irregular y le ordenaron presentarse. No obstante, le encontró la vuelta: pidió cinco meses de licencia y va a iniciar su trámite jubilatorio.

Elías renunció a la presidencia de la Caja en 2020, luego de 17 años en el cargo. Se radicó en Buenos Aires y consiguió que su sucesor, Edgardo Scarione, le otorgara una adscripción para ir a trabajar al Congreso de la Nación. Según informó en ese entonces, se iba como asesor al despacho del diputado nacional Marcelo Casaretto (PJ-Entre Ríos) con el objetivo de elaborar un proyecto de ley de movilidad jubilatoria.

Poco se supo en estos años sobre la tarea desempeñada por Elías en la Cámara de Diputados de la Nación. No obstante, su adscripción se fue renovando año a año y continuó cobrando su sueldo de la Caja de Jubilaciones. 

A fin de 2023, con Frigerio ya electo gobernador, Elías logró que se le autorizara una última adscripción al Congreso, firmada por Scarione en el tramo final de la gestión de Gustavo Bordet. Tras la revisiones encargadas por la nueva administración, la adscripción de Elías fue una de las tantas que resultó anulada por irregular.

Ante esta situación, desde la Caja que hoy preside Gastón Bagnat, se le informó a Elías que debía presentarse a trabajar en el organismo el 1º de marzo. Pero el ex funcionario tomó otro camino: pidió cinco meses de los días de licencia ordinaria que tenía acumulada y se encuentra reuniendo la documentación para iniciar su trámite jubilatorio, dado que cuenta con 38 años de aportes.