Castillos de arena, derrumbes y miserias

No voy a juzgar desde esta columna conductas que, de oficio, para bien o para mal, me incluyen en las generales de la ley. Quiero decir, es muy difícil para los que pasamos la vida detrás de los micrófonos, delante de las cámaras o frente a un teclado, asegurar que nunca nos hemos equivocado. Tal vez lo que sí podemos afirmar algunos es que si lo