Globos, pito y matraca

Pocos oficios tan atractivos, pocos tan apasionantes y amenos como el periodismo. Pero cuánta responsabilidad adiciona el poder político-económico empecinado, como hoy, en trocar periodismo por difusión, en colocar máscaras a sus caros operadores para que actúen de periodistas, con el triple propósito de engañar al pueblo, erosionar el noble