El Presidente y los requisitos de Maquiavelo

Luego de tanto encierro, recuperadas algunas libertades, los ciudadanos corroboran en el espacio urbano lo que las estadísticas anticipaban. Los gurises que piden una moneda o reparten estampitas deambulan entre las mesas de los reabiertos bares. Los hedores que de pronto emergen en alguna calle avisan que alguien, una madre o un padre, un adulto